La inmunoterapia y los anticuerpos conjugados son fundamentales para tratar el cáncer de vejiga

La inmunoterapia y los anticuerpos conjugados han surgido como los principales avances en el tratamiento del cáncer de vejiga, superando a la quimioterapia basada en platinos, que ha sido el método preferido durante los últimos 40 años, según informó este lunes la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM). Esto se dio a conocer en el contexto de la campaña 'En Oncología cada avance se escribe en mayúsculas'.

Los avances del cáncer de vejiga

Durante el mes de concienciación sobre el cáncer de vejiga, la entidad presentó la evolución y los progresos médicos que han ocurrido en las últimas décadas en el tratamiento de diversos tumores, incluyendo el cáncer de vejiga.

Según explicó la SEOM, en el último año, dos estudios han demostrado los beneficios de las combinaciones en la primera línea de tratamiento, superando por primera vez a los esquemas clásicos que utilizan quimioterapia de cisplatino en este contexto.

El ensayo clínico denominado 'ChekMate 901' evidenció que la coadministración del anticuerpo nivolumab junto con cisplatino o gemcitabina otorga ventajas significativas en cuanto a la supervivencia global en comparación con el empleo exclusivo de quimioterapia.

Además, en el ensayo clínico 'EV-302', se observó que la combinación del anticuerpo conjugado dirigido contra la nectina-4 (enfortumab vedotina) junto con el anticuerpo PD-1, pembrolizumab, extiende la supervivencia global en contraposición a un régimen de quimioterapia que contiene platino.

Factores de riesgo

La principal causa conocida del cáncer de vejiga es el tabaco, al que se atribuyen más del 40 % de todos los casos diagnosticados. El tabaco no sólo afecta nuestra vía respiratoria a través del humo; más de 60 productos carcinógenos contenidos en los cigarrillos son absorbidos y eliminados por la orina, afectando en gran medida a las células de la pared de nuestra vía urinaria. 

Varios estudios respaldan la asociación entre la infección por el virus del papiloma humano (VPH) y el desarrollo de este tipo de cáncer. Se estima que hasta un 17 % de estos tumores podrían estar relacionados, al menos en parte, con la presencia de serotipos de alto riesgo del VPH.

Además del VPH, existen otros factores de riesgo importantes. Estos incluyen la exposición a ciertas sustancias químicas presentes en el ámbito industrial, como ciertos metales, tintes y gomas. Asimismo, se ha observado que la exposición al fármaco ciclofosfamida, utilizado en quimioterapia, aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de vejiga. Por último, la esquistosomiasis, una infección causada por un parásito que se encuentra comúnmente en África y algunas regiones de América Latina, también se ha asociado con un mayor riesgo de cáncer.

La inmunoterapia

En los últimos años, ha habido una expansión en el rango de opciones disponibles para el tratamiento en las segundas y posteriores líneas. Se ha observado que la inmunoterapia ofrece beneficios a pacientes que avanzan después de recibir quimioterapia con platino en primera instancia.

Todos estos medicamentos fueron desarrollados gracias a la realización de ensayos clínicos, en los que los pacientes desempeñaron un papel fundamental al participar en ellos. Asimismo, es importante destacar que en estos avances también colaboraron diversos centros españoles, y desde la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) se subrayó la importancia de continuar promoviendo la participación en ensayos clínicos como la mejor opción disponible, en la medida de lo posible.

Asimismo, la institución instó a que los avances que demuestren beneficios notables en el cáncer de vejiga se implementen de manera equitativa para todos los pacientes, garantizando un acceso universal al mejor tratamiento disponible para su enfermedad.