El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, espera que la reunión que mantendrá el jueves en Barcelona con el presidente de la Generalitat, Quim Torra, sirva para recuperar la “normalidad institucional” al máximo nivel pero “no espera frutos en el corto plazo” por encontrarse en las “antípodas” en temas de fondo como la cuestión territorial.
Así lo aseguró la portavoz del Ejecutivo y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. El Gobierno espera que dicho encuentro que sirva como primer paso para convocar “justo después la mesa de diálogo” comprometida con ERC.
La mesa de diálogo sigue sin fecha
Montero dio por hecho que “dentro de unos días anunciaremos la fecha de la mesa de diálogo” comprometida con ERC. También adelantó que el Gobierno acudirá a ella “con el mismo espíritu constructivo” y con el anhelo de “encontrar puntos de alianza” y de hallar “claves para dilucidar ese futuro”.
La portavoz deseó que “ojalá la normalidad institucional sea la nota dominante que empiece a presidir las reuniones entre Gobierno de España y la Generalitat” aunque reconoció que en cuestiones como la concepción del Estado Sánchez y Torra se encuentran “en las antípodas” y mantienen “un punto de vista diametralmente opuesta”.
Destacó que Sánchez irá a la cita con Torra “con espíritu constructivo” y con la confianza de “establecer unos raíles que nos permitan seguir transitando porque sólo en ese clima de diálogo” podrán acercarse posiciones y encontrar soluciones a las diferencias.
La ministra apela a la empatía y al diálogo con Cataluña
“Tenemos que ser empáticos con los problemas de Cataluña”. “Necesitamos hablar, escuchar y acudir a la reunión con una vocación franca de posibilitar puntos de encuentro que no van a ser fáciles. Es un tema complejo y este Gobierno no espera frutos en el corto plazo”, dijo. “La única solución al conflicto político pasa por el diálogo y pasa por explorar esas vías de diálogo”.
Montero calificó la cita del jueves entre Sánchez y Torra de “hito” porque tiene el objetivo de que “se normalicen las relaciones instituciones con la Generalitat”, hasta el punto de indicar que sería “bueno” que el gobierno catalán esté presente al día siguiente en la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera que la propia ministra de Hacienda ha convocado con las comunidades autónomas para negociar la senda de déficit de 2020.
"Una solución compleja"
Insistió en que el diálogo “no es una opción, sino una obligación” y manifestó su esperanza en que Sánchez y Torra consigan “avanzar en una senda” sobre la situación de Cataluña por ser “una situación que la mayoría de los ciudadanos de este país creen que llevamos demasiado tiempo sin respuesta”.
Aun así, lanzó un mensaje de prudencia al advertir de que “la solución al conflicto catalán es una solución compleja que va a requerir tiempo, inteligencia, empatía y capacidad de anticipar los retos que la sociedad catalana tiene en el medio plazo”.
Montero también habló sobre la demanda del Gobierno catalán de que intervenga un “relator” en las conversaciones entre La Moncloa y la Generalitat para facilitar que se encuentren soluciones pero descartó esta posibilidad porque “no contemplamos ninguna otra cuestión” al margen de las ya previstas.
Finalmente, confirmó que la ministra de Política Territorial y Función Pública, Carolina Darias, acompañará a Sánchez para la reunión con Torra pero no estará presente en la cita, aunque no cerró la puerta a que sí lo haga en los encuentros con la alcaldesa de Barcelona o la presidenta de la Diputación si el presidente del Gobierno lo considera oportuno “en un momento determinado”.