Rigoberta Bandini se ha convertido en una de las favoritas del Benidorm Fest y su canción 'Ay mamá' se ha colado en el corazoncito de muchos españoles. Sin embargo, en realidad la cantante se llama Paula Ribó y es una artista multidisplinar a la que desde hace tiempo se le conoce por varios proyectos vinculados con la vanguardia artística del teatro y de la música.
Vivimos en una época en la que el feminismo por tercera vez en su historia se ha convertido de nuevo en un movimiento de masas. Y quizás por eso, Bandini ha logrado calar muy hondo.
Si todavía no la conoces, te invitamos a quedarte y leer este artículo.
Rigoberta Bandini, un fenómeno de masas
Lo cierto es que hace mi lista de música en Spotify incluía canciones de Rigoberta Bandini. En mis casos ya sonaba su canción 'Ay mama', por composición vocal y ritmo pegadizo, pero fue sobre todo su letra la que me pareció de una gran eficiencia cultural muy acorde con la etapa de feminismo intergeneracional que estamos viviendo.
La artista catalana se ha colado en en el top 200 de artistas mundiales con más descargas (nº 179), algo que muy pocos españoles han conseguido.
En el ámbito musical, la artista lanzó su carrera como cantante solista en el año 2019, aunque no fue hasta el inicio del confinamiento de 2020 que acaparó los primeros puestos en las principales listas de éxitos. Su single ‘In Spain we call it soledad’ se convirtió en un auténtico fenómeno en Spotify con más de 220.000 reproducciones mensuales. Entre sus hits destacan ‘Too Many Drugs’, ‘Perra’, ‘Ay mamá’ o ‘A ver qué pasa’, canción que formó parte de una campaña publicitaria de una popular marca de cerveza.
Pero mucho antes se coló en el mundo artístico poniendo voz a ‘Caillou’ cuando solo tenía siete años. También dobló a Dakota Fanning en la película ‘Yo soy Sam’ y a actrices de la talla de Emma Stone, Elle Fanning o Shailene Woodley, entre otras.
Sus actuaciones transgresoras no dejan indiferente a nadie
La clave de Rigoberta Bandini y su núcleo ha sido convertir sus canciones en una celebración de la reivindicación. Sin trascendentalidad, con carisma.
Sus propuestas escénicas tienen la inteligencia de la ironía unida con la seguridad de creer en uno mismo. No han intentado emular fórmulas de otros, directamente han elegido el camino de un performance made in Bandini. Con mucho humor, hasta con cierta socarronería.
Benidorm Fest
El pasado 10 de diciembre, Rigoberta Bandini anunciaba que era una de los catorce seleccionados para formar parte de la primera edición de ‘Benidorm Fest’, certamen en el que España busca a su nuevo representante para ‘Eurovisión’ que tendrá lugar el próximo mes de mayo.
En la semana previa al Benidorm Fest, 'Ay, mamá' ya acumulaba más de tres millones de escuchas en Spotify y era la única de los 13 participantes que había entrado en la lista de Spotify de las 50 canciones más viralizadas a nivel global.
La victoria de Chanel Terrero en el Benidorm Fest ha generado mucha polémica. No estaba entre las apuestas para ganar el festival, sino que eran Rigoberta Bandini y Tanxugueiras las favoritas del público.
Los participantes del Benidorm Fest han derrochado compañerismo y deportividad, pero no han estado ajenos a las críticas de las redes sociales. Por ello, Bandini también ha reaccionado a todo el odio que está recibiendo Chanel.
El caso de Rigoberta Bandini, a la que muchos consideran la ganadora moral del Benidorm Fest, junto a Tanxugueiras (las preferidas en televoto y demoscopia), recuerda al de otros subcampeones de concursos que terminan triunfando más que el vencedor. Fue el caso de David Bisbal, que pese a quedar segundo en Operación Triunfo 2001, por detrás de Rosa López, se ha convertido en uno de nuestros artistas internacionales, llevando sus canciones por todo el mundo, con ventas totales que se estiman en más de 6 millones de copias. O algo más actual: Aitana. Al final eso es lo que importa.