La creación de empresas suele ser un importante baremo para medir la temperatura de una economía. En el contexto actual en el que nos encontramos, con una economía que se tambalea debido a la guerra en Ucrania y otros efectos como los de la recesión por la pandemia, el tejido empresarial español ha continuado manteniendo niveles de operaciones óptimos un año más, superando las 100.000 operaciones por segundo año consecutivo.
Estas cifras no se veían desde 2016, aunque cabe señalar que la creación de empresas aún se encuentra muy por debajo del máximo histórico, que se encuentra situado en las 150.000 constituciones registradas en 2006. Por otro lado, con respecto a 2021 estas operaciones, han descendido ligeramente, concretamente un 1,9 %. Estas cifras han sido publicadas recientemente por el Colegio de Registradores en Anuario Mercantil, en su habitual resumen anual.
La creación de empresas en España
Desde el estudio presentado por el Colegio de Registradores, queda constancia de que "un año más", ha habido un 43,4 % de nuevas constituciones. Este porcentaje de creación de empresas está también ampliamente repartido entre comercios y otros servicios que incluyen los no financieros, los inmobiliarios o los de comunicaciones. Sin embargo, el que más destaca es el sector de la hostelería, que presenta un incremento del 3,5 % con respecto al año paso.
De esta forma, la creación de empresas hosteleras, se posiciona en un 10,9 %. En contra partida, sectores como la agricultura, la ganadería o la pesca, han mostrado un descenso importante. Al igual que los transportes y el almacenamiento, que se han reducido un total de 12.9 puntos.
En cuanto a lo referente a empresas extranjeras que deciden abrir sucursales en España, este año se han inscrito 162 nuevas sucursales, una reducción frente a las 174 de 2021. Centrándonos más bien en las extinciones de empresas inscritas en 2022, estas volvieron a incrementase y alcanzaron las 37.221 operaciones, un 9,5% más que el año anterior. Una tendencia que continua al alza desde 2014.
El ladrillo y las inmobiliarias
Un punto y aparte es la cuestión de la construcción y el sector inmobiliario en el país. El mercado de la vivienda en España está mostrando un incremento que parece imparable, con una burbuja que se muestra más sólida y algo lejos de estallar. Una situación que se construyó durante 2022, año en el que la creación de empresas inmobiliarias se incrementó en un 11,6 %, siendo uno de los más destacables en el informe, así como otro ligero incremento en el sector de la construcción, con un 3,5 %.
Estas cifras de incrementos en la creación de empresas, sobre todo inmobiliarias, son un síntoma claro de un mercado en el que la especulación hipotecaria se encuentra al alza. Queda aún por ver que tipo de gestiones llevará a cabo el Gobierno para mantener la bonanza en este mercado, sin que ello repercuta al acceso a la vivienda, algo que en muchas ciudades ya empiezan a notar como un auténtico problema social.