Los altos precios de alquiler están afectando a los inquilinos españoles. Cerca del 45 % está en riesgo de pobreza y el 39,4 % gasta más del 40 % de sus ingresos en alquiler. Los precios siguen subiendo y la demanda es urgente.
Cada vez más personas, solas o en pareja, deciden vivir en estudios; porque son espacios más acogedores, mucho más optimizados y, por tanto, ayudan a rentabilizar el suelo construido.
Una resiente encuesta ha lanzado importante información sobre la relación que muchos inquilinos mantienen con la vivienda en alquiler en la que residen.
Invertir en viviendas vacacionales es una opción interesante debido a la creciente demanda de alojamientos personalizados y flexibles en el turismo en España.
El gobierno español aprobará una nueva Ley de Vivienda para regular los precios de los alquileres en zonas con alta demanda y proteger a personas en situación de vulnerabilidad.