Un estudio de la Universidad de Oviedo encontró que tener músculos aductores débiles aumenta el riesgo de lesiones en deportistas. La fuerza de los abductores no afecta este problema.
Según Ágata Asensi, nuestro cuerpo cuenta con tres cerebros, y esos necesitan estar conectados armoniosamente para poder funcionar y movernos por el mundo que nos rodea.