Tangier (EE.UU.), Fairbourne (Reino Unido) y Tuvalu, tres ciudades costeras, están cerca de desaparecer por el incremento descontrolado del nivel del mar.
El cambio climático se está acelerando a pasos agigantados y traerá consigo graves consecuencias como sequías, inundaciones, altas temperaturas y plagas de insectos. Esto afectará sobre todos a los países del hemisferio sur.
Durante el pasado mes de julio se produjeron una serie de sucesos medioambientales como las crecidas de ríos e inundaciones que causaron daños económicos y personales en algunos países de Europa central.