Debido al cambio climático y a las redes sociales, los que se hacen llamar 'cazadores de tormentas' van incrementando sus filas, pero es una actividad que supone grandes riesgos.
Los aparatos electrónicos que se someten al reacondicionamiento pasan por una reparación de cualquier desperfecto que puedan tener, para volver a estar a la venta pero a un precio más barato.