Las playas accesibles de 2025 no solo ofrecen infraestructura, sino una experiencia integral que garantiza que el disfrute del mar sea un derecho para todos, eliminando barreras y promoviendo la autonomía.
Según Rehatrans, solo el 20 % de las playas españolas están realmente adaptadas para personas con movilidad reducida, lo que ha dejado excluidas a miles de personas este verano.