El Internet de las Cosas (IoT) es una tecnología que permite conectar objetos cotidianos a internet. Para hacer frente a estos riesgos, la Unión Europea ha aprobado la norma EN 18031, que entra en vigor el 1 de agosto.
Un informe de Amnistía Internacional advierte que la digitalización y el uso de inteligencia artificial en el sistema de seguridad social británico están dejando fuera a las personas más vulnerables, como quienes viven en pobreza o tienen discapacidad.