Según una investigación reciente, la protección de bosques antiguos es crucial, ya que sus árboles milenarios o centenarios se encargan de almacenar carbono y del mantenimiento de las redes ecológicas de los ecosistemas.
El informe titulado “Frentes de deforestación; causas y respuestas en un mundo cambiante” señala que en los últimos 13 años se han eliminado más de 43 millones de árboles. Por eso, numerosos estudios determinan la tecnología como una nueva forma de fotosíntesis artificial.
Desde la Comunidad de Madrid llevan plantados casi 100.000 árboles, y se enmarca dentro de la mayor campaña de plantación que han llevado a cabo hasta ahora.
El Gobierno quiere implantar una nueva reforma para frenar los daños de la biodiversidad natural del territorio. Por eso, ha insistido en la eliminación de granjas de visones, liberar a los cetáceos y poner fin al plomo en la caza.