Comparando la brecha salarial: Un análisis de las metodologías de cálculo del INE, Eurostat y CEOE

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23/07/2023 - 19:00
Plan de igualdad y funcionamiento de los salarios entre hombres y mujeres

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La brecha salarial es la diferencia promedio entre los salarios de hombres y mujeres, calculada en base al salario de los hombres. Varios organismos, como la Comisión Europea, la OCDE y la ONU, utilizan esta definición, aunque cada uno arroja cifras diferentes para este indicador de desigualdad.

Hay diferentes parámetros para medir la brecha, pero los más comunes son: la brecha de género basada en la media, la brecha basada en los salarios medianos, la brecha por hora y la brecha mensual.

¿Qué es exactamente la brecha salarial y qué se utilizar para medirla?

La brecha salarial es la diferencia promedio entre los salarios de hombres y mujeres, calculada en base al salario de los hombres. Aunque la Comisión Europea, la OCDE y la ONU están de acuerdo en su significado, cada organismo presenta cifras diferentes para este indicador de desigualdad.

Para medir la brecha salarial, se pueden considerar diferentes parámetros. Los más utilizados son la brecha de género basada en la media, que compara los salarios promedio de hombres y mujeres, la brecha basada en los salarios medianos, que compara el valor central de la distribución salarial de ambos géneros, la brecha por hora y la brecha mensual.

Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), utilizando estas cuatro combinaciones diferentes (salarios promedio o la mediana, y salarios por hora o por mes), las estimaciones mundiales ponderadas en 2019 oscilaron entre el 16 % y el 22 %, dependiendo de la medida utilizada. En el último análisis de la OIT, se observa que esta brecha ha experimentado pocos cambios.

En España, existen dos fuentes estadísticas principales para analizar la brecha entre mujeres y hombres, ambas elaboradas por el Instituto Nacional de Estadística (INE): la Encuesta de Estructura Salarial (EES), que recoge el salario anual y excluye el sector agrícola, el personal doméstico y los funcionarios de clases pasivas, y el Salario principal de la Encuesta de Población Activa (EPA), que incluye el salario mensual y abarca todas las actividades económicas.

Variables en función de la jornada, el contrato y la ocupación

El Instituto Nacional de Estadística (INE) en España no utiliza un único concepto o porcentaje específico para medir la brecha. En cambio, proporciona datos sobre la ganancia media por sexo y por hora, considerando variables como laboral el tipo de contrato, la jornada y la ocupación, ya que estas variables influyen significativamente en el salario.

El INE calcula la brecha salarial teniendo en cuenta diferentes factores, como la edad de los trabajadores (mayor en el grupo de edad de 55 años en adelante), el tipo de jornada (mayor en jornadas a tiempo parcial), el tipo de actividad económica (mayor en actividades sanitarias y de servicios sociales) y la naturaleza del empleo (mayor en el sector privado).

Algunos sindicatos, como Comisiones Obreras, obtienen un porcentaje superior al proporcionado por el Gobierno.

España ocupa la segunda posición en la OCDE

Los datos utilizados por Eurostat para calcular la brecha salarial son provisionales hasta que se dispone de las cifras de referencia de la próxima encuesta, que se publicará en diciembre de 2024.

La definición de Eurostat para la brecha salarial no configurar a las características individuales es la diferencia entre el salario bruto por hora de los hombres y el de las mujeres, aumentó como porcentaje del salario bruto por hora de los hombres.

Este cálculo se realiza únicamente para los asalariados que trabajan en empresas con 10 o más empleados. Los salarios por hora incluyen los pagos por horas extraordinarias, pero excluyen las gratificaciones extraordinarias.

Por otro lado, la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) utiliza la mediana en lugar de la media para calcular la brecha entre hombres y mujeres. La mediana es considerada más representativa en variables como los salarios, ya que no se ve influenciada por valores extremos.

En este sentido, según el método de cálculo de la OCDE, España se encuentra entre los países con menor brecha de género, ocupando el segundo lugar en la organización.

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