Soy Luis Pablo García Coronado, fisioterapeuta en el Hospital La Paz desde 1999, y supervisor de fisioterapia desde hace 8 años.
Nuestro servicio está viviendo el coronavirus como una guerra desde una segunda línea. Nosotros, los fisioterapeutas no somos ni las enfermeras, ni los médicos, ni los celadores, ni el personal de limpieza, ni un largo etc, que están en primera línea de batalla.
Seguimos manteniendo nuestra actividad tratando a los pacientes ingresados que podemos, coordinarnos con nuestra jefatura de servicio y los médicos rehabilitadores.
La sala de fisioterapia por la que llevamos años peleando para que no nos la quiten, ya que desde hace años sobrevuela sobre nosotros el rumor de que este espacio tan grande se puede usar para otras cosas, en cuanto la dirección nos la pidió el pasado miércoles 11 de marzo para ampliar la urgencia, en cuestión de minutos, y digo minutos de verdad, todo el servicio de fisioterapia, reorganizó de un espacio donde cada día tratamos a 500 personas. El espacio diáfano que podéis ver, y que hoy se ha destinado a pacientes COVID-19.
El estar en segunda línea hace que vea cómo mis jefaturas directas se están dejando la piel, doblando jornadas y sin librar. He visto llorar a médicos que llevan años desempeñando sus funciones, he visto la desesperación y el agotamiento de enfermeras que doblan turnos y no ,libran y están agotadas, he visto cómo nos estamos reinventando todos, haciendo tareas que hasta hoy eran desconocidas.
Nosotros ya no somos sólo fisioterapeutas
Estamos en gestión de camas, gestión de ambulancias, lencería, traslado de muestras, mandando datos a primaria, apoyando a supervisores de guardia, controlando el stock de productos para COVID-19....
Y todo esto, todo esto, sin oír ni un pero, ni un no de nadie, si no todo lo contrario, ofreciéndose a trabajar fines de semana, y doblar turnos.
Esto sólo es por un motivo, aquí nadie pide aumentos de sueldo, ni compensaciones ni nada, este trabajo es vocacional, y se nos está pidiendo que ayudemos a la población, a los pacientes y a nuestros compañeros, y estaremos en segunda línea o en la línea que nos digan, haciendo lo que nuestros compañeros nos pidan.
Para nosotros esta crisis empezó hace ya algunos días, el lunes 9 de marzo fue cuando vimos cómo se estaban dando la cosas y empezamos a organizar... lo que a día de hoy es una organización al minuto....
Gracias a todos los fisioterapeutas de los hospitales de Madrid que estamos trabajando coordinados como nunca lo hemos hecho. Aprendamos de esta y sigamos así en el futuro.