A más de 32.000 fallecidos se les diagnosticó la enfermedad, mientras que otros 13.000 tenían síntomas compatibles. Esta cifra suma 18.557 fallecidos más a la cifra de Sanidad.
El sarampión, una de las principales causas de muerte entre los niños pequeños, ha crecido un 50 % entre 2016 y 2019 a pesar de que hay una vacuna segura y eficaz para prevenirlo.
Entre el 1 de marzo y el 12 de mayo en España se han registrado 43.295 muertes más de las esperadas en un año normal. Eso incluye 27.302 muertes confirmadas de COVID-19.