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Fráncfort (Alemania), 9 may (EFE).- El grupo tecnológico e industrial alemán Siemens subió un 23 % el beneficio neto atribuido en el primer semestre de su ejercicio económico, que comenzó en octubre de 2017, hasta 4.142 millones de euros, por extraordinarios y pese a la caída de la unidad de combustibles fósiles.
Siemens informó hoy de que la facturación se incrementó entre octubre de 2017 y marzo de 2018 un 1,6 %, hasta 39.964 millones de euros, gracias al fuerte incremento en Siemens Gamesa.
La entrada de pedidos mejoró en el mismo periodo un 5,5 %, hasta 44.794 millones de euros, aunque bajó en el segundo trimestre, debido a la caída de grandes pedidos en Siemens Gamesa.
El presidente y consejero delegado de Siemens, Joe Kaeser, dijo al presentar las cifras que los negocios digitales tuvieron un "resultado impresionante", que compensa los desafíos en la generación convencional de electricidad.
"La mayoría de nuestros negocios, y sobre todo nuestra oferta digital, han registrado un rendimiento espectacular y a nivel operativo han logrado superar con creces los retos estructurales que plantea la generación de los combustibles fósiles", según Kaeser.
"Al aumentar nuestras estimaciones, demostramos nuestra convicción de que la compañía está en disposición de afrontar los cambios estructurales y de moldear la industria digital", añadió.
Siemens traspasó su participación en la tecnológica Atos en sus fondos de pensiones y logró ingresos extraordinarios.
El beneficio en los negocios industriales bajó en el primer semestre un 11,2 %, hasta 4.462 millones de euros, por la caída en la generación con combustibles fósiles.
Kaeser pronosticó incertidumbres geopolíticas como las restricciones al comercio, que pueden afectar a la confianza inversora y prevé un crecimiento modesto en los ingresos, por los efectos de los tipos de cambio y de cartera.
La división de Electricidad y Gas redujo el beneficio en el primer semestre hasta 352 millones de euros, dos veces y media menos que un año antes (910 millones de euros).
Siemens ha llegado a un acuerdo con el comité de empresa y con el sindicato IG Metall para llevar a cabo la reestructuración en esta división de turbinas para la generación convencional de electricidad por la fuerte caída de la demanda, ante el auge de la renovables.
Siemens anunció en noviembre que va a recortar más de 6.000 empleos en esta área en todo el mundo, la mitad de ellos en Alemania.
Siemens Gamesa bajó en el primer semestre el beneficio un 14,7 %, hasta 227 millones de euros, pero subió la entrada de pedidos un 30 % (5.956 millones de euros) y la facturación un 51 % (4.368 millones de euros).
La Fábrica Digital subió el beneficio un 9,3 %, hasta 1.289 millones de euros, y la división de Movilidad, que va a fusionar con la francesa Alstom, incluida la sección de tracción ferroviaria de la alemana, lo incrementó un 22 %, hasta 459 millones de euros.
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