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Lisboa, 15 oct (EFE).- Los toreros y los bailarines serán los trabajadores que más sentirán los efectos de los últimos Presupuestos del socialista António Costa, que llegan hoy al Parlamento con importantes cambios tributarios en ambos casos.
Los matadores de toros, banderilleros, "forcados" y demás artistas de la tauromaquia dejarán de tener la exención del IVA que hasta ahora se les aplicaba y pasarán a pagar una tasa del 13 %, una medida impulsada por el partido animalista PAN.
La cifra contrasta con el descenso generalizado de los espectáculos culturales en directo, como obras de teatro y conciertos, que pasarán de contar con un IVA del 13 % al 6 %.
También tienen buenas noticias los bailarines, en cualquiera que sea su especialidad artística, cuya profesión será considerada como de "desgaste rápido".
Ello implica que los trabajadores podrán deducir de su declaración del IRS (similar al IRPF español) la cantidad que destinen a seguros por enfermedad, accidentes personales o seguros de vida que contemplen riesgo de muerte, invalidez o retiro por vejez.
Estas modificaciones forman parte de las consideradas "curiosidades" de los Presupuestos para 2019, los últimos de la legislatura de António Costa, que se presentan hoy en el Parlamento para su discusión y que prometen aliviar la carga de las familias.
Algunas de las medidas para conseguirlo implican una reducción de la factura de la luz, libros de texto gratuitos en toda la enseñanza obligatoria, hasta los 18 años, y un límite máximo para el ascenso de las matrículas universitarias.
También se actualizarán las pensiones, se reducirán los recortes aplicados a las prejubilaciones para los trabajadores de al menos 63 años y se disminuirá la carga fiscal a los empleados a través de un cambio en la cotización de sus horas extra.
El documento iniciará su trámite en el Parlamento el 29 de octubre y, después de pasar por las respectivas comisiones, afrontará la votación definitiva en la Cámara el 29 de noviembre.
Los socialistas necesitan el voto a favor de sus socios de la izquierda, el Partido Comunista Portugués y los marxistas del Bloco de Esquerda, con los que ya aprobó los otros tres presupuestos de esta legislatura.
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