Este virus, del que existe un bajo nivel de conocimiento entre los jóvenes, es el responsable del 5 % de los cánceres que pueden ser diagnosticados tanto a hombres como a mujeres a lo largo de su vida.
Cuando el agente viral penetra en la célula se pone en marcha un inhibidor del “sensor" responsable de advertir de la presencia de ADN extraño en la célula.