UNICEF ha entregado 44.000 botellas de agua en Gaza, ayudando a 22.000 personas por un día. La violencia ha dañado infraestructuras y 1 millón de niños enfrentan crisis humanitaria.
Rusia e Irán pueden ser, a corto plazo, los más beneficiados por la guerra; los pueblos palestino e israelí, Netanyahu y Ucrania, son los grandes perdedores.
El ejército israelí ha anunciado una “pausa táctica” diaria en ciertas zonas de Gaza para facilitar la entrada de ayuda humanitaria, pero organizaciones internacionales consideran que esta medida es insuficiente.
Sigrid Kaag, coordinadora humanitaria de la ONU, alertó sobre la grave crisis en Gaza, pidiendo un alto el fuego y acceso humanitario. La escasez de agua potable ha causado enfermedades como polio y hepatitis A.