Aires de vanguardias rusas en la nueva terminal del aeropuerto de Moscú

Moscú, 1 jun (EFE).- La obra de cuatro grandes artistas de las vanguardias rusas, pioneros del constructivismo soviético, inspiran la nueva terminal del aeropuerto Sheremétievo de Moscú, inaugurada en vísperas del Mundial de fútbol que arranca en dos semanas.

Las sencillas formas geométricas y la palestra de colores que alumbraron Varvara Stepánova y Liubov Popova en sus diseños de telas en los años veinte del siglo pasado sirvieron de andamiaje artístico a la arquitectura y el interior de la flamante Terminal B, creada por la filial serbia del estudio británico RMJM.

El constructivismo nació en la Unión Soviética en sus primeros años, cuando el sueño de una sociedad justa aún se antojaba posible y entre los artistas se respiraba mucha libertad creativa, alentada por las nuevas autoridades, que querían romper con todo lo antiguo, también en el arte.

La funcionalidad en la organización de los espacios interiores, la combinación de formas geométricas sobrias y minimalistas, dominadas por líneas asimétricas, y el rechazo de elementos decorativos definieron el nuevo movimiento al que rinde homenaje la nueva terminal.

En las paredes quedaron inmortalizados históricos carteles pintados por Alexandr Ródchenko, padre de la publicidad soviética; mientras que el diseño del suelo de la terminal -una secuencia de líneas negras y blancas alternadas- bebe de su famosa y revolucionaria instantánea "La escalera".

Los motivos de la litografía "Golpea a los blancos con una cuña roja" -cartel propagandístico pintado entre 1919 y 1920 por el gran El Lisitski, uno de los vanguardistas rusos más reconocidos en todo el mundo- adornan el piso de la zona de recogida de equipajes.

Rusia espera recibir a más de medio millón de turistas extranjeros durante el mes que durará el Mundial y, aunque la nueva Terminal B de Sheremétievo opera vuelos domésticos, muchos la usarán para viajar de Moscú a las distintas sedes del torneo.

"Estamos a las puertas del Mundial, durante el que recibiremos a muchos turistas de todo el mundo. Y Rusia tiene que ofrecer una imagen digna", dijo en la ceremonia de inauguración de la Terminal B Andréi Vorobiov, el gobernador de la región de Moscú.

La nueva terminal, donde ya opera parte de sus vuelos domésticos la compañía Aeroflot -la aerolínea de bandera rusa- tiene una capacidad para 20 millones de pasajeros anuales, una superficie superior a los 110.000 metros cuadrados, 64 puestos de facturación y 19 pasarelas de acceso a las aeronaves.

"Este año esperamos un incremento del flujo de pasajeros hasta los 45 millones, cinco millones más de los que usaron este aeropuerto el año pasado", dijo Vorobiov.

La nueva terminal está designada con la letra B, pero eso no significa que sea la segunda de Sheremétievo, ya que el principal aeropuerto de Rusia ya contaba con otras tres terminales de pasajeros (D, E y F), situadas todas al norte de la pista de vuelo.

El aeropuerto moscovita estrenará pronto una quinta terminal, la C, que le permitirá doblar su actual capacidad cuando se inaugure el año que viene, ya que por ella podrán pasar otros 20 millones de pasajeros anuales.

Tanto la Terminal B como la futura C, además de la Terminal A que opera vuelos privados, se encuentran al sur de la gran pista de vuelo, y para conectar los dos sectores del aeropuerto se ha puesto en marcha un tren no pilotado, el único del mundo que circula por un túnel construido debajo de las pistas.

"Los aeropuertos de Moscú están entre los mayores beneficiados" del Mundial, "dado que su modernización ayudará a incrementar el flujo de pasajeros incluso después del evento", concluye la agencia internacional de calificación de riesgo Moody's en un informe publicado esta semana.

Por Arturo Escarda