El glaciar de Monte Perdido, uno de los más grandes del Pirineo, ubicado a unos 3.000 metros en el Parque Nacional de Ordesa, se ha dividido definitivamente en dos, cumpliendo las peores previsiones.
El pasado 17 de noviembre, la temperatura global de la Tierra superó los dos grados Celsius por encima de los niveles preindustriales, marcando un hito crítico en la lucha contra el cambio climático.
Un estudio proyecta que el calentamiento global podría expandir la agricultura a 2,7 millones de kilómetros cuadrados en las próximas cuatro décadas, especialmente en áreas del norte como Canadá, Escandinavia y Rusia.
Mont Blanc, la montaña más alta de Francia, ha perdido más de dos metros en dos años debido al cambio climático. Esta pérdida es un ejemplo de los impactos globales del calentamiento.
Un estudio advierte que un insoportable calor extremo sin precedentes podría llevar a la próxima extinción masiva, eliminando a la mayoría de los mamíferos en unos 250 millones de años.
Un estudio ha concluido que las olas de calor marinas, que son picos de temperatura del agua del mar que duran al menos cinco días, son más intensas a profundidades de entre 50 y 250 metros.