El cambio climático podría alargar el verano medio año por lo menos (y no es algo bueno)

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29/01/2022 - 08:30
Imagen de una hoja representando el cambio climático

Lectura fácil

El cambio climático afecta a todos los seres vivos muy gravemente. El impacto que produce este grave problema es enorme, y principalmente repercute en la calidad de vida de los seres humanos en la falta de agua potable, los cambios en las condiciones para producir los alimentos, la muerte de las especies y el aumento de los fenómenos naturales como las tormentas, las sequías y las olas de calor.

Y es que, todo esto podría ir a peor. Un calentamiento global de 2ºC más respecto a la era preindustrial debido al cambio climático prolongaría el verano entre 20 y 21 días más respecto a los 91 días actuales, lo que se traduciría en 112 o 112 días estivales en regiones de latitudes medias como el este de Asia, el Mediterráneo y Estados Unidos.

Y podrías pensar, ¡qué bien, hace sol y buena temperatura en invierno! Pero yo que tú me preocuparía. Esto no es buena señal.

Los veranos son cada vez más largos y calurosos mientras que los inviernos son más cortos y cálidos debido al cambio climático

Así se desprende de una investigación publicada en la revista 'Environmental Research Letters' y liderada por la Universidad de Ciencia y Tecnología de Pohang (conocida como Postech), en Corea del Sur.

Con la aparición de la covid-19, ahora se ha convertido en una costumbre controlar la temperatura corporal antes de ingresar en determinados restaurantes o edificios, pues se considera que incluso un aumento de 1ºC es peligroso para la salud. Entonces, ¿qué ocurre si la temperatura de la Tierra aumenta 1°C o 2°C? Por primera vez, un equipo de investigación de Postech ha cuantificado la duración del verano a medida que sube la temperatura de la Tierra.

El calentamiento global es el resultado del cambio climático. Ya que, este es el aumento de la temperatura del planeta tierra, provocado fundamentalmente por las emisiones que se hacen a la atmósfera de los gases de efecto invernadero.

Estos son derivados principalmente por la actividad que realiza el ser humano, los cuales están provocando las variaciones en el clima, que de forma natural no se pueden producir.

Claro, la idea de veranos más largos puede sonar muy bien para unas vacaciones familiares o para disfrutar del aire libre. Sin embargo, el hecho de que esta estación se extienda podría afectar significativamente nuestra salud, el medio ambiente y la agricultura.

Las olas de calor podrían prolongarse

También, las enfermedades transmitidas por mosquitos podrían propagarse aún más. Sin mencionar que la temporada de alergias al polen podría volverse más severa y la etapa de crecimiento de los cultivos será más larga.

El objetivo del Acuerdo de París es “mantener el aumento de la temperatura media mundial muy por debajo de 2°C con respecto a los niveles preindustriales, y proseguir los esfuerzos para limitar ese aumento a 1,5°C con respecto a los niveles preindustriales”. En 2021, la temperatura media mundial fue alrededor de 1,11°C superior a los niveles preindustriales, según la Organización Meteorológica Mundial (OMM), agencia de la ONU especializada en el tiempo, el clima y el agua.

El equipo de investigación de Postech, dirigido por Seung-Ki Min y Bo-Joung Park, ha examinado el alargamiento de la temporada veraniega por el cambio climático en condiciones de 1,5°C y 2°C utilizando simulaciones de conjuntos grandes de múltiples modelos climáticos globales.

Una diferencia de medio grado puede parecer pequeña, pero su consecuencia es enorme. Si la temperatura global aumenta 2°C, se pronostica que el nivel del mar aumentará 10 centímetros en comparación con las condiciones de calentamiento de 1,5°C. Si el calentamiento se estanca en 1,5°C, cerca de 10 millones de personas se librarán de la amenaza del aumento del nivel del mar. También se espera que una subida de 2°C eleve el número de personas afectadas por la escasez de agua hasta en un 50%.

A medida que el verano dura más, los calentamientos tempranos y tardíos también se han vuelto más frecuentes

Analizando la frecuencia de días calurosos de verano durante el periodo ampliado de futuras temporadas veraniegas (número de días que superan la temperatura media de verano del clima actual), se predice su frecuencia, que es de unos dos días al año en las regiones de latitudes medias, aumenta a unos seis días, tres veces la tasa actual. Ese número se reduce a unos cuatro días si el calentamiento se reduce a 1,5ºC.

"Hemos confirmado el alargamiento de la temporada de verano y el aumento asociado de la frecuencia de días similares al verano en las regiones del hemisferio norte de acuerdo con los objetivos de temperatura del Acuerdo de París", explica Seung-Ki Min.

La emergencia y el cambio climático está afectando gravemente a nuestro planeta. Si bien podría parecernos que estar más meses bajo el sol podría ser positivo, un cambio tan importante en las estaciones creará un cataclismo en los ecosistemas que funcionan de forma equilibrada en cuanto a horarios y temperaturas se refiere. Ni qué decir del polen alergénico en el aire, que permanecería más tiempo e inhalaríamos más; las aves también migrarían a destiempo; o incluso contaríamos con un escenario perfecto para la proliferación de mosquitos tropicales portadores de enfermedades que se expandirían hacia el norte y provocarían brotes preocupantes durante estos meses de verano tan largos y calurosos que tendremos en 2100.

Es hora de tomarnos en serio la reducción drástica de las emisiones de carbono.

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