Una investigación publicada en "BMJ Open" ha demostrado cómo la contaminación puede afectar a la hora de que los niños autistas ingresen en hospitales.
La contaminación atmosférica sigue causando riesgos a todo el mundo, pero más a los pequeños e incluso a los que aún no han nacido y que se encuentran en el vientre materno.
Un grupo de científicos estadounidenses ha realizado un estudio donde han demostrado cómo la unión del calor extremo y la contaminación aumentan el riesgo de muerte.