Más de 7,5 millones de personas en todo el mundo sufren de COVID persistente, lo que se refiere a síntomas que persisten después de que la infección aguda por COVID-19 ha desaparecido.
A pesar de que, poco a poco, se han ido quitando las restricciones, la mascarilla sigue siendo objeto de debate, y más tras el reciente aumento de casos en China.
La ciudad china de Wuhan se dio a conocer en todo el mundo por ser el epicentro del coronavirus. Han pasado tres años desde aquella noticia que dejó aislados a sus habitantes, para poco después aislar al resto del mundo.