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Nacer o quedarse sin visión supone un reto mayúsculo en el día a día de las personas ciegas, además de una dificultad añadida a la hora de llevar a cabo actividades que muchos otros individuos disfrutan, como jugar al fútbol.
Para concienciar a la sociedad sobre cómo viven estas acciones, la ONCE de Terrassa (Barcelona) y el equipo de fútbol Terrassa FC han organizado una actividad en la cual tres jugadores del primer equipo se han puesto en la piel de sus homónimos futbolistas ciegos que participan en las categorías adaptadas.
Los participantes en este encuentro han fallado la mayoría de los pases y penaltis que han efectuado, pero sus errores solo han puesto en valor la dificultad de practicar un deporte sin uno de los sentidos.
El reto de seguir jugando: futbolistas que enfrentan la ceguera
La ceguera supone un desafío personal y emocional para cualquier persona, pero en el caso de deportistas profesionales, como los futbolistas, esta pérdida sensorial puede suponer un antes y un después en su carrera. Sin embargo, algunos han decidido no rendirse y han transformado su vida deportiva para seguir practicando lo que más aman: el fútbol.
A través de testimonios como el de futbolistas que han quedado ciegos por enfermedades degenerativas o accidentes, se revela el impacto psicológico de perder la visión. "Sentía soledad y miedo a la hora de correr, de chutar", expresa uno de ellos. Lo que antes era automático, se convierte en un terreno desconocido que exige reaprender desde cero.
El impacto emocional y físico de perder la vista
Para un futbolista, la coordinación visual es esencial. Cuando esta se pierde, surge la inseguridad, el miedo a lesionarse y la frustración de no poder rendir como antes. La ceguera no solo afecta físicamente, también emocionalmente: aislamiento social, pérdida de confianza, ansiedad o incluso depresión son comunes.
A pesar de todo, muchos futbolistas no se detienen. A través de programas de apoyo, acompañamiento psicológico y la inclusión en equipos de fútbol para ciegos, encuentran una nueva forma de vivir su pasión. Este tipo de fútbol se juega con un balón sonoro, guías de voz y normas adaptadas.
Fútbol adaptado: una segunda oportunidad para muchos futbolistas de seguir en el campo
El fútbol para ciegos, incluido en los Juegos Paralímpicos, ha ofrecido una alternativa para que los futbolistas ciegos sigan compitiendo. En este deporte, los jugadores aprenden a guiarse por el oído, confiar en sus compañeros y adaptarse a una nueva percepción del espacio.
La inclusión deportiva se ha convertido en una herramienta poderosa para la rehabilitación, no solo física, sino también emocional. Existen escuelas, federaciones y programas que fomentan esta práctica, ayudando a romper barreras sociales y a visibilizar la discapacidad de una forma positiva.
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