La precariedad del empleo, las altas tasas de paro, la crisis por la pandemia o el precio de la vivienda hacen cada vez más difícil encontrar el momento para la planificación familiar.
Los servicios sociales o las ONG podrán determinar si una persona cumple los requisitos aunque viva con otras con las que no tenga relación afectiva o familiar.
Los parados que han agotado sus prestaciones contarán con un subsidio de 430 euros durante 3 meses que va dirigido a aquellos que no han encontrado trabajo y no pueden optar al IMV.