España escala al puesto 14 en el ranking mundial de lucha contra el cambio climático

En un contexto global donde la emergencia climática exige pasar de las promesas a los hechos, España parece estar haciendo los deberes con mayor diligencia que muchos de sus vecinos. Según los datos publicados por Servimedia, basados en el último informe del Índice de Desempeño del Cambio Climático (CCPI), España ha escalado posiciones hasta situarse en el puesto 14 de la tabla mundial. Este ranking, que evalúa a los 63 países (más la Unión Europea) responsables de más del 90 % de las emisiones globales, confirma la tendencia positiva de la política medioambiental española y su transición energética en la lucha contra el cambio climático.

El ascenso no es un dato menor. El CCPI es una herramienta de monitoreo independiente que permite comparar el desempeño de protección climática de diversos países. Que España haya mejorado su clasificación indica que las medidas adoptadas en los últimos años, especialmente las relacionadas con la hoja de ruta de descarbonización y el despliegue de tecnologías limpias, están empezando a dar resultados tangibles y reconocidos internacionalmente.

Un ascenso impulsado por las renovables y el marco político

¿Qué ha hecho España para merecer esta subida? El informe destaca varios pilares fundamentales. En primer lugar, el despliegue masivo de energías renovables. La geografía española, unida a una inversión estratégica en energía solar fotovoltaica y eólica, ha permitido que el mix eléctrico del país sea cada vez más limpio, reduciendo la dependencia de los combustibles fósiles a un ritmo superior a la media europea.

Además, los analistas del CCPI valoran positivamente el marco legislativo español. El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), actualizado y reforzado, se percibe como uno de los más ambiciosos de la Unión Europea en la lucha contra el cambio climático. La eliminación progresiva del carbón en la generación eléctrica y los objetivos de reducción de emisiones para 2030 han sido factores determinantes para sumar puntos en las categorías de "Política Climática" y "Emisiones de GEI" (Gases de Efecto Invernadero). España ya no es vista como un país que va a remolque, sino como un actor proactivo que intenta liderar la transformación verde en el sur de Europa.

Cómo leer el ranking en la lucha contra el cambio climático: un puesto 14 que sabe a victoria

Para entender la verdadera dimensión de este puesto 14 en la lucha contra el cambio climático, hay que comprender la peculiar metodología del CCPI. Tradicionalmente, los tres primeros puestos de este ranking se dejan vacíos (desiertos). Esto es una forma de denuncia por parte de las organizaciones que elaboran el informe (Germanwatch, NewClimate Institute y CAN), señalando que ningún país del mundo está haciendo lo suficiente para cumplir estrictamente con el límite de 1,5 °C del Acuerdo de París.

Por tanto, estar en el puesto 14 significa, en la práctica, ser el undécimo país con mejor desempeño del mundo en la lucha contra el cambio climático. España se sitúa por delante de grandes potencias económicas que siguen lastradas por su dependencia de los hidrocarburos o por políticas climáticas erráticas. Estar en la parte alta de la tabla, calificada como de desempeño "alto", envía una señal de confianza a los inversores en economía verde y refuerza la posición diplomática de España en las negociaciones internacionales de las Conferencias de las Partes (COP).

Los retos pendientes para entrar en el 'top 10'

A pesar de las buenas noticias, el informe también sirve como recordatorio de las tareas pendientes. Escalar al puesto 14 es un éxito, pero estancarse ahí sería un fracaso. Los expertos señalan que, si bien la generación de electricidad va por buen camino, España todavía tiene asignaturas difíciles de aprobar.

La descarbonización del sector del transporte sigue siendo el gran caballo de batalla, con una penetración del vehículo eléctrico que, aunque crece, lo hace más despacio que en el norte de Europa. Asimismo, la eficiencia energética en la edificación y la gestión de emisiones en el sector agrícola y ganadero son áreas donde el margen de mejora es amplio.

El informe de Servimedia subraya que la lucha contra el cambio climático no es un sprint, sino una maratón. España ha cogido un buen ritmo y ha adelantado posiciones, demostrando que la sostenibilidad y el crecimiento económico pueden ir de la mano. El reto para los próximos años será mantener esa ambición política y acelerar la implementación de medidas en los sectores más rezagados para, quizás en la próxima edición, lograr entrar en el codiciado "top 10" real de los países que salvan el planeta.