Nordea gana 2.589 millones de euros hasta septiembre, un 7 % más

Helsinki, 24 oct (EFE).- Nordea, el mayor consorcio bancario de los países nórdicos y bálticos, obtuvo un beneficio neto de 2.589 millones de euros en los nueve primeros meses de 2018, un 7 % más que en el mismo periodo del año anterior, informó hoy la entidad.

El consorcio, que presentó sus primeros resultados tras mudar su sede central desde Suecia a Finlandia el pasado 1 de octubre, registró hasta septiembre una ganancia operativa de 3.264 millones de euros, un 2 % más en términos interanuales.

El beneficio por acción creció un 7 %, hasta 64 céntimos de euro, mientras que las pérdidas netas por préstamos se situaron en 143 millones de euros, un 52 % menos.

En cuanto a su solvencia, el banco nórdico cerró el tercer trimestre con un ratio de capital Tier 1 -el de máxima calidad- del 20,3 %, un punto porcentual más que hace doce meses.

Los resultados muestran una mejoría de la rentabilidad, ya que la entidad aumentó sus beneficios pese a que sus ingresos se redujeron un 5 %, hasta los 6.902 millones de euros.

No obstante, esta mejoría se vio frenada durante el tercer trimestre del año, un periodo que el banco calificó como "complicado" debido a "las difíciles condiciones del mercado y la menor actividad corporativa".

Entre julio y septiembre, Nordea obtuvo un beneficio neto de 684 millones de euros, lo que supone una caída del 37 % respecto al mismo trimestre de 2017.

En este periodo su ganancia operativa se redujo un 35 % interanual, hasta 866 millones de euros, lastrada por la caída de los ingresos, que se desplomaron hasta los 2.046 millones de euros, un 19 % menos.

"Los ingresos del tercer trimestre fueron decepcionantes y también se caracterizaron por la estacionalidad", admitió el consejero delegado de Nordea, Casper von Koskull.

El máximo responsable del banco nórdico resaltó que, por otro lado, la calidad crediticia se mantuvo sólida y las ratios de capital alcanzaron "un nivel sin precedentes".

Nordea trasladó su sede de Estocolmo a Helsinki a principios de octubre para así poder integrarse en la Unión Bancaria europea, ya que Suecia no pertenece a ella y Finlandia sí.

La operación, anunciada un año atrás, permitió al banco nórdico convertirse en la octava entidad financiera más grande de Europa por capitalización bursátil, con unos 36.000 millones de euros.