La convocatoria ordinaria de la Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU), o más conocida como selectividad, se llevará a cabo del 1 al 17 de junio. Será la segunda ocasión que, por la pandemia de Covid-19, todo el alumnado deberá llevar mascarilla, respetar una distancia de seguridad de 1,5 metros y las aulas deberán ventilarse.
Métodos a seguir para que la selectividad sea todo un éxito
La selectividad determina directamente el camino académico que podrán seguir los estudiantes en relación a la nota que obtengan en la prueba, ya que deben obtener cierta calificación para acceder a cada uno de los grados universitarios que existen.
En este momento está abierto el plazo para que el alumnado se matricule en estas pruebas de acceso a la universidad, lo cual avisa que quedan pocas semanas para la importante cita. Este procedimiento, y el propio examen, hace que los estudiantes sufran estrés, ansiedad y nerviosismo. ¿Cómo deben los aspirantes a estudiantes universitarios preparar las asignaturas y los contenidos para la prueba de selectividad?
Estamos hablando de una convocatoria providencial para el futuro académico de los jóvenes, por lo que la anticipación, la constancia y la dedicación son fundamentales para poder sacar la nota que necesitan. Siempre es mejor que les sobre nota a que les falte para acceder a la titulación que deseen.
Preparar el plan de estudio con muchos días de margen
En esta importante prueba se evalúan los contenidos que se han estudiado durante la etapa posobligatoria del Bachillerato, por lo que, teniendo esto en cuenta, repasar todas las unidades de las diferentes materias a lo largo del curso es una muy buena idea para refrescar la memoria y los conceptos.
Para tranquilidad de los aspirantes, el horario y el calendario de la EBAU se publican meses antes de que se celebre la convocatoria ordinaria, de modo que, con este tiempo de antelación, se puede preparar y planificar con muchos días de margen el plan de estudio para estos exámenes.
Calendario y horario de estudio
A los estudiantes les interesa organizarse, marcarse un calendario y un horario de estudio. Para esta programación, se aconseja aprovechar todos los días que queden hasta la prueba y no concentrar todos los contenidos o materias en pocos días. Además de resultar poco productivo, es agobiante y el objetivo es llegar al examen con tranquilidad y confianza.
Es mejor comenzar con aquellos contenidos más difíciles y dedicar los últimos días a lo que puede resultar más fácil. De esta forma, el tramo final de los estudios se hace menos denso. La programación debe también ir en consonancia con las fechas de los exámenes, dando prioridad a los temas que primero les van a preguntar.
Por tanto, contar con una programación y determinar unas franjas horarias para cada asignatura permite establecer rutinas. Espaciar los contenidos y ser constante con el calendario previsto es fundamental para estar bien preparado.
Silencio, tranquilidad, sin móvil, simulacros de examen, descansos y repasos
Por otro lado, hay que seguir los consejos habituales para estudiar. Es muy recomendable estudiar en una habitación con luz natural, ordenada, cómoda, silenciosa y que permita la concentración. Asimismo, es aconsejable apagar el móvil o ponerlo en modo avión para evitar cualquier tipo de distracción, como entrar en las redes sociales o chatear con alguien.
También resulta interesante hacer varias simulaciones de exámenes con modelos reales de otros años, ya que facilita habituarse a las preguntas del mismo y saber que se puede elegir entre varias preguntas en algunos casos. Luego, hay que repasar mucho los contenidos para llevarlos frescos a la evaluación.
Finalmente, hay que hacer hincapié en que también hay que desconectar a ratos del tema. Es necesario descansar, relajarse, practicar deporte y dormir bien para evitar el desgaste físico y mental que supone la selectividad en los jóvenes.