Un terremoto de magnitud 8,8 frente a la península de Kamchatka, Rusia, generó alertas de tsunami en varios países del Océano Pacífico, incluyendo Japón, Hawái, Alaska, Canadá y América Latina.
En Myanmar la población afectada por el seísmo se encuentra en una situación crítica, ya que las necesidades humanitarias son mayores que los recursos, según denunciaron ONGs del Comité de Emergencia Español.
Después de un año de los devastadores terremotos en el sur de Turquía y el norte de Siria, miles de familias continúan viviendo en asentamientos temporales enfrentando desafíos como la falta de agua y otros bienes de primera necesidad.
Un terremoto en Nepal ha dejado 153 muertos y más de 338 heridos, afectando principalmente a niños y niñas. Muchas personas quedaron atrapadas mientras dormían.