La tasa de ocupación de personas con trastornos de salud mental es del 15 %, y la cifra es mucho peor si se trata de mujeres, y más si son del mundo rural.
Nuestra capacidad auditiva nos ayuda a comprender nuestro entorno, si vivimos con un trastorno como la misofonía podría llegar a deshacer nuestros lazos familiares.
El ser humano es muy vulnerable a la hora de sufrir situaciones que le llevan a un malestar social, por ejemplo la pérdida de un ser querido o los momentos de estrés. Sin embargo, es importante diferenciar este malestar con los trastornos mentales.