Tras la mala racha que se vivió en el verano, los contratos fijos discontinuos han aumentado hasta posicionarse como los más demandados por las empresas.
Durante el mes de mayo el paro bajó por primera vez desde el 2008. Tras ello, las afiliaciones han aumentado, pero la brecha de trabajo entre hombres y mujeres sigue existiendo, algo que denuncia Implika.