Mahdi Gilbert, el ilusionista que derribó las barreras de la discapacidad a golpe de magia

Cuando naces con una discapacidad sabes que tu vida no va a ser como la de los demás y que tendrás que superar una serie de barreras para las que no siempre tendrás ayuda. Mahdi Gilbert fue consciente de ello desde muy pequeño al nacer sin pies ni manos en una localidad de Toronto, en Canadá, hace ya 34 años. Sin embargo, eso no le detuvo a la hora de perseguir un sueño: el de la magia. Si hacerse en hueco en este sector es complicado, más lo fue para él.

Pero con 12 años de carrera profesional en el mundo de la magia y el ilusionismo, Mahdi Gilbert no solo ha logrado alcanzar sus sueños, sino que se ha hecho un gran nombre en el sector. Gracias a ello fue invitado al 20 Festival Internacional Vive la Magia que se celebró en León, uno de los encuentros más importantes a nivel europeo. Así, este joven con gran habilidad, protagonizó la gala unipersonal, la primera parada de este festival, con su espectáculo 'La Voluntad Interior'.

Mahdi Gilbert y su voluntad cargada de magia

Como todo gran mago e ilusionista, Mahdi Gilbert consigue que los espectadores acaben a su merced y entregados a su voluntad. Al principio, los espectadores "se fijan en mi discapacidad", admite el mago en una entrevista que ofreció a Servimedia, pero enseguida la olvidan para dejarse llevar por la ilusión, por la magia. Para él, “es muy importante que el público capte esa fuerza interior" de la que habla el espectáculo, "esa voluntad indestructible".

Una voluntad que ha sido el motor en la vida de Mahdi Gilbert desde muy pequeño. Recuerda haber tenido que superar una infancia llena de “barreras y con dificultades, también económicas", comentaba durante la entrevista, que de algún modo le hicieron aspirar a “lo imposible”. “Por puro instinto de supervivencia sabía que necesitaba la magia en mi vida”, confiesa, porque "había muchos obstáculos que superar".

Este artista de la magia, también explicaba que su discapacidad, lejos de disuadirle de sus sueños, le empujó con más fuerza hacia ellos. Unos sueños que iniciaron a la tierna edad de los 11 años, cuando vio en televisión el espectáculo de un gran mago británico que "embaucaba a todos con su discurso”. “Esto sí es lo mío, pensé. Yo no tengo manos, pero sí tengo una boca y una lengua. Puedo ser como él”, recordaba Mahdi Gilbert.

Construir el repertorio con el que ahora se presenta a nivel internacional no fue nada fácil. “Probaba cien cosas y nada me salía”, rememora, “hasta que de repente daba con algo que sí funcionaba y lo incorporaba al repertorio”.

España, un puente hacia el éxito

Todo este trabajo duro tuvo su momento de brillar con la primera gran oportunidad profesional que Mahdi consiguió precisamente en España. Ocurrió cuando tan solo tenía 22 años, "durante el cumpleaños del gran Juan Tamariz”, señala. “Juan y yo nos conocimos en Estados Unidos en una convención de magia y trabamos buena amistad”.

“Meses más tarde me invitó a participar en un festival que quería organizar con otros magos por su cumpleaños, y aquí me vine”. Desde aquella primera oportunidad, la proyección de Mahdi Gilbert ha sido imparable. Se maneja como pez en el agua con los juegos de cartas y se mete al público en el bolsillo con las historias sobre su propia vida que intercala en el espectáculo. “Si consigo que mi emoción les llegue (al público) el hechizo se habrá consumado”, concluyó.