La Navidad trae consigo las celebraciones y las comidas, algo que puede ser perjudicial para las personas que sufren un trastorno alimenticio. Por eso, es importante tener en cuenta algunos consejos.
La Navidad es tiempo de excesos, de reuniones, de comer y de beber, en muchas ocasiones, un poco más de la cuenta con todas las consecuencias que esto puede acarrear para nuestra salud.