Agujeros blancos, una realidad imposible de demostrar para el ser humano

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10/09/2023 - 18:00
Los agujeros negros en el espacio

Lectura fácil

En el mundo de la astrofísica, la cosmología y sobre todo de la ciencia ficción, los agujeros negros han capturado nuestra imaginación durante mucho tiempo debido a su naturaleza enigmática y sus efectos gravitacionales extremos. Sin embargo, junto con los agujeros negros, los científicos han explorado la posibilidad de la existencia de su opuesto complementario: los agujeros blancos.

Aunque aún no se ha demostrado su existencia de manera definitiva, son consideradas como soluciones matemáticas posibles dentro de la teoría de la relatividad general propuesta por Albert Einstein. La idea detrás de los agujeros blancos es fascinante. Si los agujeros negros son conocidos por atrapar todo lo que se acerca a su horizonte de eventos, los blancos funcionarían de manera opuesta.

Cualquier material que entre en un agujero blanco será expulsado a una velocidad mayor que la de la luz, creando un intenso resplandor blanco. En esencia, serán fuentes de emisión de materia y energía en lugar de absorbentes.

Así funcionarían los agujeros blancos

Para entender mejor esta idea, imagina una película que muestra la formación de un agujero negro. Si pudieras reproducir esta película al revés, verías un proceso en el que un objeto emite radiación y partículas y eventualmente explotará, dejando atrás una estrella masiva. Esta imagen invertida de un agujero negro podría considerarse como los agujeros blancos. Aunque estas ideas son teóricas y matemáticas, plantean cuestiones intrigantes sobre la naturaleza del espacio-tiempo y la gravedad.

La mera existencia de agujeros blancos plantea desafíos importantes. A diferencia de los agujeros negros, cuya formación se comprende en cierta medida, la formación de estos primeros es un misterio. Se cree que los agujeros negros se forman cuando una estrella masiva agota su combustible nuclear y colapsa bajo su propia gravedad. Pero cómo podrían formarse los blancos sigue siendo un enigma.

Algunas teorías sugieren que podrían ser "salidas" de los agujeros negros, conectadas a través de las estructuras teóricas conocidas como agujeros de gusano. Estos son entendidos como puentes hipotéticos a través del espacio-tiempo que podrían conectar diferentes regiones del universo. Sin embargo, hasta ahora, no hay evidencia observacional de su existencia. Si los agujeros de gusano estuvieran relacionados con los agujeros blancos, será una parte fundamental para poder comprender su origen y comportamiento.

Inestables y breves

Por otro lado, también se ha señalado que los agujeros blancos serían inestables y no durarían mucho tiempo antes de colapsar en agujeros negros. Esta inestabilidad plantea desafíos para su detección y observación en el universo real. Otra de sus grandes dificultades para ser demostrados es su naturaleza inexpugnable, ya que cualquier material que ingresase en uno de ellos sería expulsado inmediatamente y con fuerza. De momento quizá estos agujeros empiecen a cobrar más relevancia en la ciencia ficción, pero poco podemos hacer salvo teorizar sobre su existencia, lo curiosa que resulta y las amplias posibilidades.

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