El aumento de las temperaturas en invierno ha provocado ambientes más suaves e induce a los árboles y arbustos a prolongar su temporada de polinización y por tanto su alergenicidad.
El aumento de las temperaturas en esta zona ya está provocando consecuencias, que pueden ir a peor si no se tiene en cuenta que el calentamiento global es real.
Las negociaciones en la Cumbre del Clima entre los países participantes no han llegado a buen puerto. Las llamadas de emergencia no han servido para mucho.