La mayoría de la población no conoce las consecuencias que puede ocasionar el glaucoma, ni es consciente de que con una detección precoz se podría reducir su impacto.
La uveítis puede ser grave y provocar la pérdida permanente de la visión. El diagnóstico y el tratamiento tempranos son importantes para prevenir complicaciones y preservar la visión.
El glaucoma de ángulo cerrado o glaucoma agudo se produce debido a la elevación de la presión intraocular, un problema visual que si no se trata puede terminar en ceguera.
Científicos del Trinity College Dublin, en Reino Unido, han identificado un objetivo muy prometedor para el desarrollo de terapias para diferentes formas genéticas de la ceguera.