El PP ha acusado al PSOE de querer llevar a Baleares el "exprópiese" que aplicó en Venezuela el expresidente Hugo Chávez y ha avisado que esa actuación frenará la inversión en las islas.
La Delegación había anunciado que permitiría concentraciones con una previsión de asistencia menor a 500 personas. El Gobierno basa la prohibición final en que las convocatorias podrían reunir en zonas de Madrid a unas 60.000 personas.