La precariedad laboral se ceba con los interinos de cultura

La precariedad laboral lamentablemente siempre ha sido una constante dentro de la cultura, concretamente en el sector de las artes escénicas y de la música. Los contratos duran lo que la temporada teatral o la gira de conciertos programados, generando inestabilidad, a la que además se le suma un salario no siempre bien remunerado. La cultura y el arte, tienen una importante labor en la sociedad, ya que son el reflejo de lo que somos y nos dan a conocer al mundo.

Pero ni si quiera los trabajadores públicos del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM) se libran de esta precariedad laboral. Ellos también se han visto envueltos en una consecución de contratos temporales, incluso en puestos que se consideran 'estructurales', es decir, que son permanentes independientemente del espectáculo o la representación. sindicatos e interinos del mundo de la cultura denuncian la poca oferta de plazas fijas del sector.

La precariedad laboral en la cultura

¿Quién no se queda maravillado presenciando una representación teatral en la Zarzuela? o dejándose cautivar por esas voces armoniosas y perfectas del Coro Nacional. Detrás de estas experiencias artísticas, existe una gran cantidad de trabajadores que se encargan del maquillaje, el vestuario o el sonido, trabajos igual de importantes que lo que se acaba viendo en el escenario. Sin embargo, muchos de ellos, y también los artistas, sufren la precariedad laboral traída por los contratos temporales y los suelos mínimos.

Con la nueva reforma del Ministerio de Hacienda y Función Pública que pretende abordar el asunto del trabajo temporal en la administración, se pretende menguar este tipo de precariedad laboral. Pero al parecer, las plazas fijas ofertadas para puestos estructurales aún siguen siendo insuficientes y en muchos casos exigen formación que por tema de plazos es casi imposible de obtener. Así lo han denunciado desde sindicatos del sector cultural.

En busca de un contrato decente

La precariedad laboral tiene un impacto negativo en la vida de cualquier trabajador. No solamente el hecho de percibir rentas más bajas, que ya de por si genera una tendencia a la desigualdad, sino también en el aspecto temporal. Este último puede afectar incluso a la salud mental de las personas, ya que vivir en una constante incertidumbre laboral genera mucho estrés.

Pero hay más, como la que comenta Javier Figueroa, responsable de cultura en UGT: "Esta situación tiene consecuencias para los trabajadores: no pueden solicitar un crédito, cuando en un banco ven que son interinos y que la nómina es temporal, no tienen esa opción".

Según datos de la UGT, la temporalidad en el INAEM alcanza hasta el 30 %, superando con creces la que existe en la Administración General del Estado, que ronda entre el 8 y el 19 %. La precariedad laboral es un escollo para el desarrollo profesional y personal y está claro que ni si quiera trabajando en el sector público estás a salvo de ella.