Escocia se ha convertido en el primer país del mundo que crea una ley para asegurar el acceso gratuito a los productos de higiene menstrual, para cubrir las necesidades que esta genera.
A pesar del gran fallo con las estaciones de tren inaccesibles, el Gobierno de Pedro Sánchez se respalda en que la otra mitad si lo son, como si fuera suficiente.