En 2024, Unicef intervino en 448 emergencias en 104 países afectados por conflictos y desastres naturales, brindando salud, nutrición, educación y protección a niños vulnerables.
La llegada del verano y, como consecuencia, de las altas temperaturas favorece la proliferación de bacterias en los alimentos, lo que hace que estos se estropeen más rápidamente.
La organización ecologista plantea un nuevo modelo alimentario que reduce el consumo de carne y apuesta por las legumbres como base para combatir la crisis climática y mejorar la salud pública.
Fundación MAPFRE ha donado más de 10.000 kilos de alimentos a la Asociación Pato Amarillo, que ayuda cada mes a unas 300 familias del barrio madrileño de Orcasitas.
Ante múltiples crisis globales, la infancia vive una emergencia silenciosa: uno de cada tres niños y niñas no accede a servicios esenciales como salud, educación o protección.