Hoy recordamos la abolición de la esclavitud pero, ¿hemos acabado con ella?

La esclavitud lleva acabando con el derecho a la libertad y autodeterminación de las personas y pueblos desde hace siglos, desde que las primeras civilizaciones se gestaron. Avanzando en la historia, nos hemos encontrando con importantes hitos que han ido cambiado tanto la definición como las condiciones de los esclavos. El punto de inflexión más importante, y más cercano, para la Edad Contemporánea, es la abolición de la trata de esclavos en 1791.

Día Internacional del Recuerdo de la Trata de Esclavos y de su Abolición

Una noche del 22 al 23 de agosto de 1791, una revuelta de los pueblos esclavos que se encontraban sometidos en Saint Domingue, actualmente Haití, lograron acabar con el yugo de la esclavitud que les oprimía y conseguir su libertad. Este hecho tuvo una especial importancia a nivel histórico, ya que esta isla situada en Centroamérica, era el principal punto de comercio de esclavos. Para conmemorar este día y lo que se logró en el, desde la UNESCO, decidieron implantar el Día Internacional del Recuerdo de la Trata de Esclavos y de su abolición.

Uno de los principales objetivos para conmemorar esta fecha histórica, es el de no olvidar la tragedia que supuso el comercio de esclavos durante siglos, dotar de dignidad y reconocimiento a los pueblos que fueron víctimas de la esclavitud y para tener un punto de referencia a la hora de comprender mejor la interrelación que existió entre el continente africano, Europa y América.

"Es hora de abolir la explotación humana de una vez por todas, y de reconocer la dignidad igual e incondicional de todos y cada uno de los individuos. Recordemos hoy a las víctimas y a los defensores de la libertad del pasado para que inspiren a las generaciones futuras a construir sociedades justas", dijo Audrey Azoulay, Directora General de la UNESCO, para conmemorar este día especial, recordando que aún, y por desgracia, seguimos viviendo situaciones de esclavitud.

Nuevas formas de esclavitud

En la actualidad se viven nuevas formas de esclavitud, e incluso modelos muy parecidos. La trata de personas para explotación sexual o laboral, las condiciones de vida que dejan en situaciones de vulnerabilidad a los pueblos, facilitando su explotación, e incluso la neo-esclavitud que nos imponen los sistemas de producción poco humanos, un tema sobre el que reflexiona el filósofo contemporáneo Byung-Chul Han, nos hace ver que aún siguen existiendo formas en las que las personas y los pueblos se ven privados de su libertad.

Se acaba con ella a través de la sostenibilidad

Los modelos sostenibles prometen ser el camino, no solo para acabar con el cambio climático y sus consecuencias, sino también para poner fin a las desigualdades, principal factor para aflorar sistemas de esclavitud, y para iniciar una transición hacia modelos productivos y de consumo que nos permitan ser más respetuosos con el medio ambiente, pero también con las sociedades que habitan el planeta.