18/04/2021 - 12:30
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'Ayuso somos todos, gracias por cuidarnos'. Ese es el eslogan que han colgado muchos hosteleros madrileños en sus bares para agradecer que la presidenta de la Comunidad de Madrid se haya negado a estigmatizar al sector cerrando su actividad u obligándoles a cumplir unos horarios tan reducidos, que hacen imposible la viabilidad de sus negocios.
La trágica pandemia del coronavirus ha erigido a Isabel Díaz Ayuso como la salvadora de la hostelería frente a otras CCAA
Tanto es así, que en las manifestaciones que vienen llevando a cabo los hosteleros por toda España, para reclamar a los gobernantes de turno poder seguir trabajando, son habituales las consignas de "¡queremos una Ayuso!", "¡Ayuso ven aquí!" o la exhibición de carteles con la foto de la presidenta.
Ahora, los carteles han aparecido en las cristaleras o en las barras de los bares madrileños que continúan funcionando con la normalidad que les permite la pandemia.
Una gran mayoría se encuentra en la zona de Ponzano. Gallego, el dueño de 'La Parroquía' sorprendió a sus clientes el pasado 10 de marzo. Este zamorano de 50 años, que sirve tapas en Madrid desde los 90, subió a su casa aquella mañana, encendió el ordenador, se metió en el perfil de Facebook de Isabel Díaz Ayuso, imprimió dos fotos suyas a tamaño folio y las estampó tras la barra del bar. “A esta señora le debo estar abierto con el coronavirus. Sobrevivo gracias a ella, es así de sencillo y por eso puse sus fotos”, cuenta en EL PAÍS.
El ayusismo hostelero: Tirar una caña en Madrid es una cuestión política desde el inicio de la pandemia
Tras él, una docena de negocios han seguido sus pasos con pegatinas en las puertas: “Ayuso somos todos. ¡Gracias por cuidarnos!”. Algunos, según cuentan los dueños de los locales, fueron promovidos por clientes afines al PP.
Esta mezcla de fanatismo y admiración hacia la presidenta crece cada día en Madrid gracias al eco de los medios de comunicación.
La hostelería es uno de los sectores que más empleos ha generado en España en los últimos años
En la capital son cerca de 270.000 familias las que viven gracias a este negocio, que aporta el 4,6 % del PIB a la ciudad. El equipo de Ayuso apostó por los bares desde el pasado mayo como antagonismo al zarpazo del coronavirus en la ciudad. Si el resto de comunidades los cierra, Madrid los abre. Siempre.
“Gracias a vosotros no perdemos la identidad”, les dice a los hosteleros a menudo. Por prometer, Ayuso les prometió hasta la vacuna antes que nadie.
La realidad es que esta decisión no depende de ella, sino del Ministerio de Sanidad, pero el engranaje propagandístico de la Comunidad desliza lo que todos los camareros quieren escuchar.
El voto de los bares ya está decidido
No hay semana sin que la presidenta entre a un bar, suba a una foto a sus redes, se reúna con el sector o lance guiños a los camareros.
El PP se ha apropiado de lleno de la palabra libertad y la ha llevado a su eslogan de campaña. La equipara a algo tan sencillo y español como tomarse una caña en una terraza. Y sin embargo, Madrid es la única región que no ha impulsado ayudas directas a los hosteleros.
Uno de cada tres trabajadores que está en ERTE en la comunidad son de la hostelería y uno de cada cinco restaurantes, casi 7.000 de los 19.300 que existen, han cerrado desde el inicio de la pandemia. Y muchos negocios del centro consultados se quejan de la licencia de terrazas, donde, según datos del sector, solo cuatro de cada diez disponen de una.
Es muy difícil encontrar bares que se salgan de la corriente ayusista.
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