15/12/2022 - 09:46
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La mayoría de los edificios de viviendas tienen barreras arquitectónicas que dificultan que las personas con movilidad reducida puedan acceder a sus casas de manera independiente y segura.
Escalones en el portal o la entrada, escaleras sin rampa, telefonillos muy altos, puertas muy pesadas... Son algunos de los ejemplos más comunes de barreras arquitectónicas en edificios de viviendas.
En la Fundación Mutua de Propietarios trabajan sin descanso para dar visibilidad a la problemática que suponen las barreras arquitectónicas en edificios de viviendas, especialmente para personas con movilidad reducida, y por eso, gracias a sus ayudas económicas, se han rehabilitado cerca de 1.200 viviendas.
Campañas de sensibilización social como ‘#Supervecinos’ o ‘La historia de Idoia’ han contribuido a concienciar en la necesidad de eliminar barreras arquitectónicas
Cerca de mil edificios de viviendas se han beneficiado de las ayudas económicas para la eliminación de barreras arquitectónicas que concede la Fundación Mutua de Propietarios, qUe celebra su quinto aniversario reafirmando su compromiso con la mejora de la calidad de vida de las personas con movilidad reducida.
“Los logros obtenidos desde 2017 nos animan a seguir avanzando para alcanzar un parque de viviendas libre de barreras arquitectónicas que garantice el derecho a una vida independiente de todas las personas”, afirmó Laura López Demarbre, vicepresidenta ejecutiva de la Fundación Mutua de Propietarios, en el acto conmemorativo de este aniversario celebrado en Barcelona.
Con el objetivo de mejorar la accesibilidad a la vivienda y su entorno, la Fundación tiene abiertas cuatro líneas de actuación:
- Financiación de obras de eliminación de barreras arquitectónicas;
- campañas de sensibilización social;
- acción e inclusión de las personas con movilidad reducida,
- e innovación aplicada a la accesibilidad, mediante el desarrollo de nuevas tecnologías que contribuyan a mejorar las condiciones de vida de este colectivo.
En sus cinco años de actividad, el Programa ‘Sin Barreras’ ha puesto al alcance de las comunidades vecinales los recursos financieros y técnicos para mejorar la accesibilidad en las áreas comunes de un edificio, destinando 993.547 euros a la eliminación de barreras arquitectónicas en 1.193 viviendas donde residen 2.983 personas con movilidad reducida.
Con este fin, se han realizado obras por valor de 4,7 millones de euros para a la creación de itinerarios accesibles que incluyen la instalación de ascensores, plataformas elevadoras o salva escaleras, la ejecución de rampas para eliminar desniveles o la motorización de la puerta de acceso, entre otras acciones.
Tecnología al servicio de la Accesibilidad
Como parte de su programa Tecnología e Innovación, la Fundación Mutua de Propietarios ha desarrollado herramientas, aplicaciones y estructuras que han contribuido de forma efectiva a hacer accesible el itinerario desde la vía pública a la vivienda.
En 2020 presentó ‘Zero Barreras’, la primera aplicación que mide el grado de accesibilidad de cada uno de los elementos comunes de un edificio, identificando de una forma sencilla cuáles son las barreras arquitectónicas a las que se debe enfrentar una persona con movilidad reducida al acceder a su finca.
En 2021, la Fundación Mutua de Propietarios presentaba la primera Rampa impresa en 3D, una solución para sortear los escalones de acceso al edificio de una forma rápida, eficiente, rentable y duradera. Las Rampas 3D fueron presentadas por la periodista Samanta Villar que, como parte de su compromiso con las causas sociales, apoyó la instalación de la primera rampa piloto en una comunidad de propietarios de Barcelona con el objetivo de testar los retos tecnológicos que planteaba el proyecto.
Precisamente en el ámbito de la sensibilización social, la Fundación Mutua de Propietarios ha dirigido sus esfuerzos a dar a conocer los testimonios de superación de personas con movilidad reducida. Junto a la recientemente estrenada “Historia de Idoia”, donde la bailarina navarra nos adentra desde su silla de ruedas en las barreras arquitectónicas que debe superar día a día, la Fundación ha desarrollado diversas campañas entre las que destaca “SuperVecinos”, galardonada en los Premios Agripina y en los Premios Redes en Acción, de la Fundación Mutua Madrileña.
La campaña recogía el caso real de Andrea, una mujer con Parkinson, en silla de ruedas, que vivía en un cuarto piso sin ascensor. A través de un experimento social con su comunidad de vecinos, la campaña quiso hacernos reflexionar sobre la situación de las 100.000 personas con movilidad reducida que no pueden salir nunca de sus hogares por la falta de accesibilidad de su edificio.
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