Cómo hacer churros caseros

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02/01/2022 - 11:30
Churros caseros con azúcar

Lectura fácil

No os podéis imaginar las ganas que teníamos de compartir esta receta de churros con vosotros, ¿a quién no le gusta disfrutar de una buena taza de chocolate caliente acompañada con unos churros recién hechos? Es una de esas cosas tan ligadas a la Navidad, que casi no concibo empezar esta época del año y no disfrutar de ellos. Es más, si nos fijamos en Google Trends, 'cómo hacer churros' es una de las búsquedas que más se ha repetido este año entre los usuarios de Internet.

Esta sencilla receta hará que vuestros desayunos de fin de semana sean mucho más sabrosos. Sin embargo, antes de empezar, nos gustaría ofreceros algunas curiosidades de los churros que quizás no sabíais.

El origen de los churros

Estamos rodeados de infinidad de recetas de las que es muy difícil saber cuál es su origen real, como puede ser en este caso con los churros.

El churro tal y como lo conocemos no es tan diferente de una receta de buñuelos que se encuentra en un libro romano del siglo I a.C. Eso quiere decir que ¿nuestras famosos churros son una evolución de una receta de China? Tal vez fueran los portugueses quienes lo introdujeron en la Península Ibérica. Según el historiador gastronómico Michael Krondl.

En Madrid, San Ginés, abrió sus puertas en el año 1894. En el Madrid del siglo XIX había buñolerías por todas partes, ya que era un tentempié muy solicitado por los madrileños. Valle Inclán se fijó en este establecimiento y lo nombró como ‘buñolería modernista’ en ‘Luces de Bohemia’. La costumbre de tomar chocolate en Madrid es tan antigua como el descubrimiento de América, que fue cuando los españoles nos maravillamos con este producto. De hecho, el chocolate fue la bebida favorita de nuestras gentes hasta que en el siglo XX se impuso el café.

Es cierto que lo más habitual es ver los churros acompañados de una taza de chocolate caliente, pero no es de extrañar acompañarlos con un buen café o disfrutarlos solos incluso, con un poco de azúcar espolvoreado por encima.

¿En qué se diferencian los churros de las porras?

El blog Divina Cocina explica muy bien esta diferencia:

  • Las denominaciones cambian en distintas partes de España. En el norte son churros los de masa más compacta que suelen prepararse ‘acanalados’. Las porras son más gruesas y huecas. Sin embargo en Extremadura, Andalucía, Murcia y otros lugares se llama churros a ambos productos. Los acanalados son churros de papa, de lazo o simplemente churros finos.
  • La única diferencia entre los churros y porras es que la masa de las porras lleva bicarbonato y hay que dejarla reposar unos 10 minutos antes de freír. Por otro lado los churros se preparan con boquilla rizada y las porras o churros de rueda se hacen con manga redonda.

Trucos y consejos a tener en cuenta antes de seguir nuestra receta

  • Es mejor usar harina de fuerza (harina panadera, rica en gluten) para que la masa no salte ni chisporrotee en el aceite.
  • Se puede añadir un chorrito de aceite a la masa. De esta forma no salta y además queda más sabrosa.
  • La masa debe estar espesa, como una bechamel densa, para que no salte en el aceite. Regula el nivel de harina hasta conseguirlo.
  • Hay que compactar bien la masa dentro de la manga o la churrera, que no tenga aire, que esté consistente.
  • También es importante que la masa esté muy bien mezclada y no haya restos de agua para que no salten al freírlos.
  • La masa que sobre se puede guardar bien tapada de un día para otro.

Receta de churros:

Ingredientes

  • 1 vaso de agua
  • 2 vasos de harina de fuerza
  • 1 cucharadita rasa de sal
  • Un par de cucharadas de aceite (opcional, pero por experiencia la masa salta menos en el aceite)
  • Aceite para freír

Elaboración

  1. Calentamos el agua hasta que llegue casi a hervir, retiramos del fuego y añadimos de golpe el resto de ingredientes.
  2. Mezclamos hasta que quede una masa fina y espesa. Tiene que estar muy bien mezclada para que no haya restos de agua que puedan hacer saltar la masa.
  3. La metemos en una churrera o en manga pastelera con una boca rizada. Puedes usar una bolsa de plástico fuerte con un agujerito como de 1 cm. de diámetro en un pico para que quede el churro liso.
  4. Lo prensamos bien para que no haya huecos y lo vamos echando en aceite muy caliente en tiras o haciendo un ‘lazo’. Retiramos cuando estén dorados.
  5. Hay que tener en cuenta que aumentan el volumen. Podemos usar aceite de girasol o de oliva –le dará más sabor– según los gustos. Y para servir, mojamos en azúcar o en chocolate, café… al gusto.

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