Haití al borde del colapso por violencia, desplazamiento y el control creciente de las pandillas

EmailFacebookTwitterLinkedinPinterest
10/07/2025 - 08:58
Haití al borde del colapso

Lectura fácil

La situación en Haití continúa deteriorándose rápidamente, con señales alarmantes de un colapso total del Estado. Así lo advirtió Miroslav Jenča, secretario general adjunto de la ONU para América, durante una sesión del Consejo de Seguridad dedicada a analizar la crisis del país caribeño.

El avance imparable de las pandillas en Haití

Desde principios de 2025, las pandillas han incrementado significativamente su poder territorial, especialmente en la capital, Puerto Príncipe. Jenča explicó que, aunque durante su visita en enero la ciudad ya se encontraba paralizada, hoy la situación es aún más crítica: los grupos criminales han intensificado su control, amenazando con llevar al país a un punto de no retorno.

Los datos de la Oficina Integrada de la ONU en Haití (BINUH) son contundentes: más de 4,000 personas han sido asesinadas en lo que va del año, entre ellas al menos 465 mujeres y menores de edad. Esta cifra representa un aumento del 24 % respecto a 2024.

Desplazamientos masivos y comunidades en crisis

La violencia ha obligado a más de 1,3 millones de haitianos a abandonar sus hogares, convirtiéndose en desplazados internos. El desplazamiento masivo más reciente ocurrió en La Chapelle, en la región de Artibonite, donde un ataque armado expulsó a unas 9,000 personas y destruyó la estación de policía local.

Ante la creciente ausencia del Estado, comunidades enteras han comenzado a organizarse en grupos de autodefensa. Aunque estos buscan protección, también han incurrido en graves violaciones a los derechos humanos. En solo tres meses, al menos 101 personas acusadas de colaborar con pandillas fueron ejecutadas sin juicio alguno.

Entre marzo y abril, la ONU documentó 364 episodios de violencia sexual en Haití, con 378 víctimas, en su mayoría mujeres y niñas. Las pandillas utilizan estos ataques como herramientas de terror para dominar comunidades enteras. Jenča subrayó que sin avances en seguridad, cualquier progreso político será imposible.

El representante de la ONU reconoció el trabajo de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad, liderada por Kenia, que lleva un año operando en Haití. A pesar de su presencia, el panorama sigue siendo sombrío. Jenča lamentó la muerte de dos agentes de la misión e instó a aumentar las contribuciones financieras al fondo fiduciario que la sostiene.

También se propuso la creación de una oficina logística de la ONU que fortalezca la misión sobre el terreno, así como una revisión del mandato de BINUH para adaptarlo a las nuevas condiciones.

Armas, seguridad privada y el mercado negro

Ghada Waly, directora ejecutiva de la UNODC, advirtió sobre el crecimiento de empresas de seguridad privada y milicias locales que, en ocasiones, colaboran con pandillas y participan en acciones extrajudiciales. Esto ha incrementado la demanda de armas, alimentando los mercados ilegales y facilitando el desvío de armamento legal hacia redes criminales.

Waly resaltó los esfuerzos regionales, incluyendo la cooperación de República Dominicana, Bahamas y Turcos y Caicos, que han realizado decomisos importantes. Sin embargo, enfatizó que solo una respuesta coordinada y sostenida podrá frenar el deterioro de Haití.

“Las decisiones que tomemos hoy serán menos costosas que las que enfrentaremos si el Estado colapsa”, advirtió Jenča. “No podemos fallarle a Haití”.

Añadir nuevo comentario