La lucha de Sarah Almagro, la joven que perdió las manos y los pies por una meningitis

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22/02/2022 - 09:34
Sarah en la Facultad de Derecho de Málaga donde estudia.

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Sarah Almagro es una joven que sufrió la enfermedad de meningitis con solo 18 años y ahora lucha para que se amplíe el calendario de vacunas en toda España y nadie tenga que sufrir lo que ella ha vivido.

Los médicos no esperaban que hubiera sobrevivido, consideran su caso 'un milagro', y tanto ellos como la propia enferma tienen claro que el deporte le ha salvado la vida. Amante de las actividades acuáticas, Sarah volvió a la rutina y, entre otras cosas, a clase de Derecho a la Universidad, aunque su sueño ahora es ser triatleta paralímpica y participar en los Juegos de París.

Sus padres confía en que su caso sirva para dar a conocer la enfermedad porque aseguran que la gente debe tomar conciencia de que las vacunas son importantes, son por su bien.

Con 18 años la vida de Sarah Almagro sufrió un revés durísimo

Ismael Almagro llevaba días pensando cómo contarle a su hija que los médicos iban a tener que amputarle los pies y las manos. "Sarah, te garantizo que tendrás como mínimo la misma vida que tenías, ¿confías en mi?". El silencio inundó la habitación. Relata NIUS Diario.

"Yo no sabía ni lo que era una amputación, pero te toca y tienes que investigar", e Ismael investigó. Libros, búsquedas en Internet, congresos... le enseñan que en su lucha existen dos caminos: lo que hay en la sanidad pública y lo que debería haber. "Lo que le ofrecían era arcaico, va 15 o 20 años por detrás del mercado", dice el padre de Sarah, "con pies de madera y manos en forma de pinza". 

Aquello no era lo que le había prometido a su hija, pero lo que le había prometido, una vida normal, tenía un precio. "Llevamos gastados 260.000 euros", dice Ismael, "eso no lo tiene cualquier familia". Tampoco ellos que tuvieron que hacer un llamamiento a la sociedad. Y así en lugar pies de madera y manos de pinza, Sarah pudo acceder a prótesis mucho más avanzadas que le han mejorado la vida hasta el punto de que estos días está compitiendo en Bilbao en un campeonato de surf adaptado.

A través de la asociación 'Somos tu ola' inició una campaña para concienciar sobre la importancia de las vacunas

La familia de Sarah Almagro ha mantenido reuniones con responsables del Gobierno a fin de incluir en el calendario vacunal la tetravalente de meningitis con serotipos A, C, W. 

El primer paso ya se ha conseguido, con el compromiso de la Junta de Andalucía de introducirla y esperan que la iniciativa se extienda al resto de España, puesto que ya está implantada en otros países. 

¿Cuántos niños tienen que morir y cuantos afectados con graves secuelas tiene que haber para que el Gobierno se decida de una vez por todas a aprobar un calendario vacunal común para todas las comunidades que incluyan la vacunas contra el Meningococo B y la tetravalente contra los Meningococos A C W Y no solo en los adolescentes sino también en los lactantes?

Su lucha personal continúa, sus riñones siguen sin funcionar, lo que la mantiene en diálisis semanal y los médicos descartan un trasplante, por el momento, debido a su estado físico, ya que podría rechazarlo. Los muñones de sus brazos ya están curados, preparados para poder acoplarse a unas prótesis biónicas, verdaderos artilugios robotizados cuya longevidad no va más allá de los ocho años, y su precio unitario ronda los 50.000 euros.

La batalla estaba ganada pero la lucha continuaba

El Ministerio de Sanidad amplió la financiación hasta los 11.500 euros para las prótesis de pies, pero en el caso de las manos solo llegó hasta los 36.000 euros para la mano dominante.

Una mano biónica como las de Sarah costaban más de 80.000 euros, y ahí estaba su objetivo para que todos pudieran acceder a lo mismo que accedió ella.

Aún quedaba otra opción, que la Junta de Andalucía completara la cantidad de forma individualizada mediante el nuevo catálogo ortoprotésico andaluz. Y aquí es donde llega la primera derrota de Sarah Almagro y su familia. Después de muchas reuniones y de algunas promesas, de momento, no hay nada.

El camino de concienciación sobre la meningitis no está siendo fácil para Sarah, que tiene sus días y momentos de bajón pero que gracias al apoyo social, a la gran solidaridad que su caso ha originado, se siente muy arropada y con fuerzas.

Meningitis, la enfermedad más temida por los padres

La meningitis no es un problema cuantitativo de salud pública. Antes muere la gente de cáncer, enfermedades cardiovasculares o accidentes de tráfico. Se trata de un problema cualitativo en tanto que afecta mayoritariamente a nuestros niños y jóvenes, pero también puede recaer a personas de otra edad.

La meningitis ha disminuido gracias a la vacunación sistemática contra el Haemophilus influenza tipo B, Meningococo C y Neumococo. Pero sigue habiendo afectados de las bacterias que no están incluidas en el calendario de vacunación.

No se entiende cómo algo que hace tanto bien a la comunidad y que previene una enfermedad con un 10 % de mortalidad y un 20 % de secuelas, dependa del bolsillo de los padres provocando una gran desigualdad. 

Tiene una pequeña incidencia, pero sus consecuencias son tan devastadoras que a los padres les aterra su nombre. 

La enfermedad meningogócica invasora es la patología prevenible con vacuna que más preocupa. El 76 % la sitúan entre las tres más temibles, por encima de la hepatitis B y la infección por neumococo. Es llamativo que solo el 6 % de los progenitores sitúe el sarampión entre las enfermedades más preocupantes para sus hijos, una cifra que se queda en el 18 % en el caso de la difteria.

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