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Fundación ONCE ha lanzado la II Convocatoria para el desarrollo de ‘Campus de verano UniDiversidad’, una iniciativa destinada a universidades y entidades del Tercer Sector interesadas en organizar campamentos para jóvenes con discapacidad intelectual entre julio y septiembre de 2025.
Tras el éxito de la edición anterior, en la que participaron casi 600 jóvenes de distintos puntos de España en campamentos desarrollados dentro y fuera del país, Fundación ONCE lanza ahora la segunda convocatoria, que pretende ayudar “a superar los déficits que existen de ofertas formativas, culturales y de ocio para los jóvenes con discapacidad intelectual” y que está cofinanciada también por el Fondo Social Europeo.
En este sentido, diversos estudios indican que los jóvenes con discapacidad intelectual participan en menor medida que sus iguales en actividades sociales y recreativas. Y esto pese a que, sostienen los mismos trabajos, dichas actividades incrementan la autoestima, favorecen la interacción social y proporcionan adquisición de habilidades y competencias para prosperar en una vida autónoma y tener más oportunidades de empleo.
Fundación ONCE relanza sus Campus de verano para jóvenes con discapacidad intelectual
Cada verano, Fundación ONCE refuerza su compromiso con la inclusión social y educativa a través de sus Campus de verano para jóvenes con discapacidad intelectual. En 2025, esta iniciativa vuelve con más fuerza que nunca, ofreciendo una experiencia formativa y de ocio en un entorno inclusivo y accesible. El objetivo es claro: fomentar la autonomía, las habilidades personales y la empleabilidad de estos jóvenes, preparándolos para afrontar nuevos retos.
El programa, que se desarrolla en colaboración con universidades de todo el país, está diseñado para que los participantes disfruten de una experiencia universitaria real, adaptada a sus necesidades y capacidades. Una propuesta educativa diferente, que busca reforzar la autoestima, mejorar la vida social y abrir puertas al futuro laboral.
Una experiencia educativa real
Los Campus combinan formación teórica, talleres prácticos y actividades lúdicas. Los jóvenes asisten a clases impartidas por profesores universitarios y expertos en inclusión, que abordan temas como habilidades sociales, competencias digitales, orientación laboral o habilidades para la vida independiente.
Además, se fomenta el trabajo en equipo, la comunicación y la participación activa, en un ambiente que potencia el aprendizaje a través del juego, el deporte y la cultura. Los programas suelen tener una duración de entre una y dos semanas, con alojamiento incluido, favoreciendo así la convivencia y la independencia de los participantes.
Un entorno inclusivo y accesible
Una de las claves del éxito de los Campus de verano de Fundación ONCE es su enfoque integral: no se trata solo de aprender, sino de vivir una experiencia inclusiva en todos los sentidos. Las universidades implicadas adaptan sus instalaciones, materiales y metodologías para asegurar la accesibilidad universal.
La participación de monitores especializados, junto con el trabajo coordinado entre educadores, profesionales del ámbito social y las propias familias, garantiza una atención personalizada y de calidad. Cada joven es protagonista de su proceso, con apoyo constante pero fomentando la autonomía.
Un paso más hacia la inclusión laboral
Más allá del verano, estos campus tienen una función estratégica. Muchos jóvenes descubren nuevas vocaciones, desarrollan habilidades que les servirán en su futuro profesional o amplían su red de contactos. En ediciones anteriores, algunos participantes incluso han accedido posteriormente a programas universitarios específicos para personas con discapacidad intelectual, impulsando así su inclusión en el sistema educativo superior y en el mercado laboral.
Con esta iniciativa, Fundación ONCE demuestra una vez más que apostar por la inclusión no es solo un derecho, sino una oportunidad para toda la sociedad.
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