Un cuarto de los casos de cáncer de pulmón ocurre en personas que nunca han fumado

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27/07/2025 - 12:00
Cáncer de pulmón

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Un reciente estudio científico ha revelado que uno de cada cuatro casos de cáncer de pulmón se presenta en personas que jamás han fumado, y ahora hay una pista clara sobre el posible origen: la contaminación atmosférica.

Hasta ahora, ya se había identificado una correlación entre el aire contaminado y el desarrollo de este tipo de cáncer en no fumadores. Sin embargo, esta nueva investigación, que ha analizado las mutaciones genéticas en tumores de pacientes no fumadores de distintas partes del mundo, va un paso más allá. Por primera vez, se ha demostrado que los contaminantes presentes en el aire pueden provocar daños directos en el ADN, estableciendo un vínculo genómico entre la polución ambiental y el cáncer de pulmón.

Este hallazgo marca un avance significativo en la comprensión de cómo el entorno puede influir en la aparición de enfermedades oncológicas, incluso en personas sin factores de riesgo tradicionales como el tabaquismo.

La investigación, publicada en la revista Nature, ha sido liderada por Ludmil Alexandrov, de la Universidad de California en San Diego (EE. UU.), y Maria Teresa Landi, del Instituto Nacional del Cáncer (NCI) de Estados Unidos. En el estudio también han colaborado los científicos Pilar Gallego y Marcos Díaz-Gay, del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) de España.

Una tendencia alarmante de cáncer de pulmón

En los últimos años, se ha registrado un aumento en los casos de cáncer de pulmón en personas que nunca han fumado. Este tipo de cáncer afecta principalmente a mujeres asiáticas y es más frecuente en el este de Asia que en los países occidentales.

“Estamos viendo con preocupación que cada vez más personas que no han fumado desarrollan cáncer de pulmón, y aún no comprendemos la causa,” comenta Ludmil Alexandrov. “Se trata de un problema mundial urgente y en crecimiento,” agrega Landi, epidemióloga de la División de Epidemiología y Genética del Cáncer del NCI.

Hasta ahora, la mayoría de los estudios sobre cáncer no han separado los datos de fumadores y no fumadores, lo que ha dificultado identificar los factores de riesgo específicos para estos últimos. “Nuestro estudio reúne información de no fumadores a nivel global y utiliza análisis genómicos para investigar qué exposiciones podrían estar vinculadas con la aparición de estos cánceres,” explica.

El equipo estudió tumores de pulmón de 871 personas que nunca habían fumado y que vivían en 28 lugares diferentes de África, Asia, Europa y Norteamérica, con distintos niveles de contaminación del aire.

Al analizar todo el ADN de los tumores, encontraron diferentes patrones de mutaciones, que son como huellas que dejan las exposiciones al ambiente.

Al comparar estos datos con los niveles de contaminación, vieron que las personas que vivían en lugares con más contaminación tenían muchas más mutaciones en sus tumores: casi 4 veces más mutaciones relacionadas con el tabaquismo y un 76 % más de mutaciones relacionadas con el envejecimiento.

"Más contaminación, más mutaciones"

Además, descubrieron que quienes estaban más expuestos a la contaminación tenían telómeros más cortos, que son partes que protegen los cromosomas y que indican envejecimiento celular.

Marcos Díaz Gay, investigador del CNIO, explicó que aunque no todas las mutaciones causan cáncer, más mutaciones aumentan las probabilidades de que algunas provoquen cáncer.

También aclaró que el cáncer no depende solo de las mutaciones, sino que otros factores, como el sistema inmunológico, influyen. Pero el estudio apoya la idea de que las mutaciones causadas por la contaminación pueden ser un factor importante de riesgo.

Una firma mutacional inesperada

El estudio descubrió otro riesgo ambiental: el ácido aristolóquico, una sustancia cancerígena que se encuentra en algunas plantas medicinales tradicionales. Esta sustancia está ligada a un patrón específico de mutaciones que se halló principalmente en pacientes de Taiwán que nunca habían fumado.

Aunque antes se había asociado este ácido con cánceres de vejiga, digestivos, riñón y hígado por su ingestión, esta es la primera vez que se relaciona con los cánceres de pulmón.

Además, el equipo encontró un nuevo patrón de mutaciones con origen desconocido, que aparece en mayor cantidad en cánceres de pulmón de personas no fumadoras comparado con fumadores. Este patrón no está vinculado a la contaminación del aire ni a otras exposiciones ambientales conocidas.

¿Marihuana o vapeadores?

“Vimos esta firma en la mayoría de los casos estudiados, pero aún no sabemos su causa. Es algo totalmente diferente y abre una línea nueva de investigación”, comenta Alexandrov.

“Esta firma mutacional es muy común: en personas que no fuman aparece en un 75 % de los casos, mientras que en fumadores solo en un 27 %. Aunque hoy no sabemos de dónde proviene, es la que más mutaciones genera en no fumadores”, explica Marcos Díaz. En futuros estudios, planean analizar casos de cáncer de pulmón en no fumadores de América Latina, Oriente Medio y más zonas de África.

Además, “queremos seguir investigando para explorar otros posibles riesgos, como el uso de marihuana o vapeadores, y factores ambientales como el gas radón, que sabemos que aumenta el riesgo de cáncer de pulmón, pero aún es poco conocido”, concluye Díaz-Gay.

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