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El Banco Central Europeo (BCE) ha estado trabajando con la posibilidad de crear un euro digital, para introducirlo como medio de pago en los países de la Unión. El proyecto se inició en octubre de 2020, y a lo largo de estos años se han llevado a cabo estudios y consultas públicas. Actualmente, se encuentra en la fase de investigación, donde se están abordando cuestiones importantes sobre el diseño y la distribución del euro digital.
El objetivo principal de lanzar este euro digital es que sea una forma práctica de pago en toda la eurozona, respaldada por el BCE. Este, se encuentra trabajando firmemente con otras instituciones de la UE que apoyan el proyecto y ven en el una vía para la modernización económica de los 27. De momento, el proyecto aún debe pasar por una serie de pruebas, antes de que el BCE decida continuar avanzando para alcanzar la fase de preparación y experimentación.
El euro digital, una realidad cada vez más cercana
Pero para continuar hablando sobre el euro digital, primero es importante comprender en qué consiste exactamente. Según la página oficial del Consejo Europeo, esta nueva moneda "sería una forma digital de 'dinero del banco central' emitido por el Banco Central Europeo para uso minorista junto con, por ejemplo, dinero en efectivo", con la intención de atender a los avances de la digitalización, promoviendo la innovación y el refuerzo de la autonomía estratégica con la que trabaja la Unión Europea.
Esto quiere decir, que el euro digital podrá llegar a emitirse como cualquier otro billete desde el BCE, y los ciudadanos podremos utilizarlos tanto en comercios digitales como en establecimientos, con el respaldo del BCE. Esta iniciativa tan potente, nace en gran medida del aumento de los pagos digitales. Según datos del Consejo, el 55 % de la población general europea, prefiere realizar sus pagos a través de un método digital.
Con él llegarán algunas ventajas, como por ejemplo las que nombran desde el Consejo:
- Complementar el efectivo y los depósitos.
- Apoyar la innovación y digitalización de la economía de la UE.
- Evitar los riesgos de soluciones de pago no reguladas.
- Reforzar el papel internacional del euro y la autonomía estratégica de la UE.
- Contribuir a la inclusión financiera, aumentando las posibilidades de elección, la competencia y la accesibilidad de los pagos digitales.
Los pasos recientes hacia este nuevo futuro
En el paso mes de junio, la Comisión Europea presentó su 'paquete sobre la moneda única', en el que se incluía un marco jurídico para la posible introducción del euro digital dentro de la economía europea, como complemento al efectivo. Este euro, a pesar de ser digital, también podría llegar a utilizarse tanto en línea como sin ella. La seguridad y la privacidad de su uso, también ha sido un punto de especial hincapié en este último paso dado hacia una posibilidad que avanza sin frenos.
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