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La Seguridad Social, junto al Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), desempeña un papel esencial en la protección de las personas en situación de vulnerabilidad o con trayectorias laborales interrumpidas. Además de las prestaciones económicas por desempleo, estos organismos ofrecen mecanismos que permiten mejorar el acceso a derechos como la pensión de jubilación, incluso en casos donde no se haya podido realizar la cotización suficiente.
Cotización ficticia para mujeres: una medida para compensar desigualdades
Uno de los instrumentos más relevantes en este sentido es la posibilidad de sumar cotizaciones ficticias a la vida laboral. Esta medida está especialmente enfocada en las mujeres que han sido madres y que, por razones vinculadas al embarazo o al parto, se vieron obligadas a dejar temporalmente el mercado laboral. Esta interrupción puede tener un impacto negativo en la carrera de cotización y, por tanto, en el acceso a la jubilación o a otras prestaciones contributivas.
Para paliar esta situación, la Seguridad Social reconoce un período de cotización adicional por cada parto, incluso si durante ese tiempo no se trabajó ni se cotizó formalmente. Esta medida busca garantizar que la maternidad no se convierta en un obstáculo insalvable para las mujeres al momento de acceder a una pensión contributiva.
¿Cuántos días se pueden sumar y en qué casos aplica?
Según el artículo 235 de la Ley General de la Seguridad Social, una mujer puede sumar hasta 112 días de cotización por cada hijo nacido, aunque no haya cotizado durante ese período.
En el caso de partos múltiples, se pueden añadir 14 días extra por cada hijo a partir del segundo. Es decir, una madre de gemelos podría obtener 126 días, y en caso de trillizos, 140 días de cotización ficticia.
No obstante, esta ayuda no se aplica automáticamente a todas las mujeres que han tenido hijos. Para beneficiarse, es imprescindible que no se haya cotizado en las 16 semanas posteriores al parto. Si la madre disfrutó del permiso de maternidad estando contratada y cotizando, esta ayuda no será aplicable, ya que la protección durante ese tiempo ya fue cubierta por la prestación correspondiente.
Requisitos adicionales y reconocimiento legal
Otro aspecto importante es que esta ayuda también puede solicitarse aunque el nacimiento haya ocurrido fuera de España, siempre que se pueda acreditar que el embarazo superó los 180 días de gestación. De este modo, se asegura que la medida pueda beneficiar a mujeres que, por motivos personales o laborales, hayan residido temporalmente en el extranjero.
Este derecho cuenta con el respaldo jurídico del Tribunal Supremo, que en su sentencia STS 1173/2023, de 19 de diciembre, dejó claro que el objetivo principal de estas cotizaciones ficticias es compensar situaciones de desigualdad. La sentencia destaca que estas medidas no buscan premiar a quienes ya tienen una carrera laboral continua, sino proteger específicamente a quienes se vieron obligadas a interrumpirla por razones vinculadas al embarazo y la maternidad.
Un paso hacia la equidad en el sistema de pensiones
Este tipo de ayudas como es la cotización adicional, representan un avance significativo en términos de equidad dentro del sistema de pensiones, ya que reconocen el impacto social y laboral que tiene la maternidad, y actúan para corregir las desventajas estructurales que enfrentan muchas mujeres en su vida profesional.
Además, sirven como un recordatorio de la importancia de diseñar políticas públicas que no solo sean igualitarias en el papel, sino también justas en la práctica. A través de estas medidas, la Seguridad Social promueve un sistema más inclusivo, en el que se valore el trabajo de cuidados y se proteja a quienes lo desempeñan, incluso cuando no está formalmente remunerado.
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